Londres.- Los silenciados hablan de nuevo. Las fotografías en color de 55 periodistas y trabajadores de prensa mexicanos asesinados en México entre 2000 y 2012 cubren las paredes del blanquísimo hall en la entrada del periódico inglés The Guardian, en pleno centro de esta ciudad.
Con el título de Los silenciados: luchando por la libertad de prensa en México, la muestra fotográfica organizada por el periódico The Guardian, el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) y la ONG cristiana Cafod, rinde homenaje a los periodistas mexicanos asesinados por cumplir con su trabajo.
La muestra no incluye la fotografía de Regina Martínez Pérez, reportera de Proceso asesinada el pasado 28 de abril en la ciudad de Xalapa, Veracruz. Los organizadores de la muestra aclaran que la ausencia se debe a que su muerte ocurrió cuando la exposición estaba por abrirse.
En la primera imagen de la serie aparece María Elizabeth Macías Castro con un micrófono en la mano y al fondo la bandera de México. Ella fue asesinada el 24 de septiembre último en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
En el texto informativo que acompaña a la fotografía se lee:
“El cuerpo decapitado de María Elizabeth, de 39 años, fue hallado en un camino cerca de la ciudad de Nuevo Laredo. En el lugar se encontró una nota en la que un grupo criminal se atribuía el crimen y aseguraba que la mataron por difundir en las redes sociales los resultados de sus investigaciones. Su muerte fue la primera documentada en el mundo por un vínculo directo entre periodismo e internet.
“María Elizabeth informó acerca de las actividades de grupos criminales en Twitter y en el sitio web Nuevo Laredo en vivo, con el seudónimo La Nena D’Laredo.”
Junto a la imagen de María Elizabeth aparece la de Noel López Olguín, muerto en 2011 en la ciudad de Chinameca. Su rostro muestra un semblante entre sorprendido y profundo. Columnista del diario La Verdad de Jáltipan, Veracruz, fue secuestrado el 8 de marzo de ese año por un hombre armado. El 31 de mayo su cuerpo fue hallado en una fosa.
A modo de nota periodística, el texto en inglés narra:
“El hallazgo se hizo luego que el Ejército mexicano arrestó a un supuesto líder criminal que confesó el asesinato. Según un investigador de la zona, el periodista murió de un golpe en la cabeza. Familiares de Noel dijeron que tenía una larga carrera como columnista de La Verdad de Jáltipan. También trabajó como fotógrafo para varios periódicos de Veracruz, incluidos los semanarios Noticias de Acayucan, El Horizonte y Noticias de Veracruz.
“Noel escribía una columna titulada Con pluma de plomo en la que se refería de manera directa al narcotráfico y la corrupción oficial prevalecientes en la región. Identificaba por su nombre a los barones de la droga, lo cual no es frecuente en las zonas donde impera el crimen organizado.”
Estulticia
Una de las imágenes más emotivas de la muestra es la de Carlos Alberto Guajardo Romero, quien aparece con su bebé en brazos. Fue asesinado el 5 de noviembre de 2010 en Matamoros, Tamaulipas. En la tarjeta informativa que acompaña su foto puede leerse:
“De acuerdo con informes de la prensa, Carlos, de 37 años, fue víctima del fuego cruzado entre militares y narcotraficantes en la ciudad fronteriza de Matamoros, Tamaulipas. El líder del cartel del Golfo, Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, estaba entre los capos que murieron en la confrontación.
“Reportero de temas policiacos en el diario local Expreso Matamoros, Carlos salió de su casa a las 11 de la mañana para cubrir el enfrentamiento en el fraccionamiento Victoria. Mientras se dirigía a la Secretaría de Seguridad Interior para obtener información, su camioneta –que no llevaba identificación de prensa– recibió más de 20 disparos, pues los militares creyeron que era un vehículo de los delincuentes.”
Otra imagen que llamó la atención de los asistentes a la muestra fue la de Yolanda Ordaz de la Cruz, reportera fallecida en julio de 2011 en Veracruz. En la foto destacan sus ojos negros que brillan con la luz del flash.
“El cuerpo decapitado de la veterana reportera policiaca fue hallado cerca de las oficinas del periódico Imagen, dos días después de que fue secuestrada por hombres armados cuando salía de su casa”, se lee en la tarjeta que acompaña la fotografía.
Y continúa el texto: “En una conferencia de prensa, el procurador del estado dijo que el asesinato no estaba vinculado con el trabajo de Yolanda y que la evidencia indicaba que sus asesinos eran miembros del crimen organizado. También sugirió que la periodista habría tenido vínculos con éste. Notiver inmediatamente exigió la renuncia del funcionario mediante un editorial que decía: ‘Rechazamos categóricamente la acusación, que calificamos de injusta, irresponsable y estúpida’.
“Las autoridades no mostraron ningún interés en la investigación. Una portavoz de la procuraduría estatal le dijo al Comité para la Protección de Periodistas que la labor de Yolanda estaba siendo considerada como posible motivo de su asesinato.”
Mensaje al presidente
Los organizadores de la muestra aseguran que “entre 2000 y 2012 más de 55 reporteros y trabajadores de prensa fueron asesinados en México y la mayor parte de estos crímenes sigue en la impunidad.
“Las historias de estos hombres y mujeres con coraje que murieron luchando por revelar la verdad han sido reunidas en esta exposición fotográfica.”
La exhibición “fue desarrollada en colaboración con The Guardian y el CPJ y fue lanzada el Día Internacional de la Libertad de Prensa, el jueves 3, para honrar el coraje y la determinación de los silenciados y de todos aquellos que a pesar de los riesgos siguen luchando para decir la verdad acerca de los cárteles de droga en América Latina”.
El inglés Chris Bain, director de Cafod, asegura que “los valientes reporteros homenajeados en esta exposición fotográfica deben ser recordados no sólo por sus muertes, sino por su dedicación para desenterrar la verdad y mostrarla a la población. Si el mundo busca a héroes, aquí están”.
Para Elizabeth Witchel, investigadora y analista del CPJ, la muestra “revela el coraje inmenso que los periodistas mexicanos han mostrado en uno de los ambientes más peligrosos del mundo para trabajar”.
El mismo día de la inauguración de la exposición fotográfica, se realizó en la sala de conferencias de The Guardian un debate sobre la violencia contra periodistas en México, en el que participaron activistas de derechos humanos, periodistas, académicos, estudiantes y sindicalistas.
Se llegó a la conclusión de que la comunidad internacional y los medios de prensa del mundo deben presionar más y de forma más contundente al gobierno de Felipe Calderón para que ponga fin al creciente número de asesinatos en contra de los periodistas, y a que cobre conciencia de la violencia catastrófica que azota a México.
(nota de Leonardo Boix en Apro, agencia de Proceso en línea.)