martes, 29 de mayo de 2012

Henrik Nordbrandt (1945 )


Carducci


El poeta Carducci, de quien no he leído nada
y del que sólo sé que está muerto
vivió en la casa que está frente a la mía.
Antes, de noche, junto al rumor del río,
anegaban mis sueños estrofas en italiano.
Por la mañana desaparecían, pero yo era incapaz
de emprender nada ni de escribir una línea,
sólo daba vueltas inquieto y ponía orden
en un desorden cada vez más inabarcable
como si varias personas se mudasen a mi casa cada día
por más que siguiera solo. Las estrofas
que llenan ahora mis sueños son atonales
acompañadas por trompas, campanas y el ruido del mercado
de la plaza que tú cruzas cada día,
y además puedo recordarlas por la mañana.
Pero, cuando te veo, pienso
que es el amor de Carducci a otra
lo que revivo, su locura la que sufro
y sus poemas no escritos lo que escribo.
Si es así de veras, lo amo
por haber usado mis ojos para ver
la luz casi invisible que te rodea
-con estas ansias que tal vez sólo los muertos posean.


(texto tomado del blog "rima interna" de Martín López-Vega en El Cultural.)