sábado, 21 de abril de 2012

Hilario Barrero (1946 )

Cementerio en Luarca




Las cruces en lo alto sostienen

la plenitud azul del mediodía

y la muerte escondida se enfrenta

victoriosa con el mar.

Matrimonios unidos de por vida

(o eso dicen las lápidas borrosas)

vinculados ahora por la muerte

esperan lo imposible:

que el mar se seque y que vuelva el amor.

Cuando vivías, un cementerio marino

me traía el recuerdo de pinos y palomas,

ahora me acerca a ti, madre,

esperando en un mar de secano

que los chillidos de las gaviotas que no oyes

te despierten y te traigan ese amor

que hace tiempo abandonó tu vida.


(texto tomado de http://mysite.verizon.net/hilariobarrero/ )