"Me gustaría que se leyera más en Barcelona", explicó en rueda de prensa el director del centro, Marçal Sintes, quien definió la obra de Müller con una poética muy dura y áspera, a la vez que tierna. La muestra Herta Müller: El círculo vicioso de las palabras rastrea la vida y obra de la escritora, desde su infancia rural en el Banato suabo hasta la entrega del Premio Nobel de Literatura. Pueden verse documentos y fotografías familiares, así como entrevistas en que la escritora habla de su vida en Rumanía, del exilio y de su escritura. La protagonista ofreció este martes una rueda de prensa previa a la realización de dos conferencias en el CCCB y en la Universitat de Barcelona (UB), donde ha profundizado en aspectos técnicos y vitales de su creación.
Víctima de haber nacido en la minoría alemana durante la dictadura del rumano Ceauscescu, Müller considera que pese a no querer volver al país, es necesario que las sociedades divididas por las dictaduras superen ese momento: "Si no se lleva a la luz de forma adecuada, acaba saliendo a la luz, como finalmente ha sucedido en España".
No obstante, explicó que la concesión del Nobel suscitó varias reacciones adversas en su país, especialmente entre quienes creyeron que este premio debía ir a un "verdadero rumano", y no a una minoría del país de la que actualmente ya no queda ni rastro. "Un representante de seguridad de mi pueblo llegó a decir que la mitad del premio debía ser para ellos porque me habían dado toda la temática para ganarlo", detalló Müller, perseguida durante años por los servicios secretos Securitate. Como miembro del "Grupo de acción Banato", la exposición muestra declaraciones de algunos de sus compañeros del grupo y extractos de las actas de seguridad que informan del sistema político riguroso y misántropo que la condujo al exilio. También pueden verse algunos de los collages de Herta Müller, creados desde finales de los años ochenta, que nos invitan a contemplar una faceta desconocida de su creación.
La autora de En tierras bajas ha reconocido que por su peripecia vital no pertenece a ningún mundo: "Es como si no formara parte de ningún sitio. En mi universo hay un poco de todo y aunque envidio a los escritores que no necesitan las metáforas, yo las busco porque tengo la sensación de que sólo puedo tocar la realidad cuando hago uso de ellas", precisó.
Müller no quiso entrar a analizar el momento actual de crisis global porque no entiende de cuestiones geopolíticas y financieras, también dijo que a la hora de enfrentarse a la página en blanco no distingue entre géneros, aunque cree que la poesía es diferente. A su juicio, la lírica puede ser vista como un conjunto de oraciones para las personas no creyentes y ha rememorado que antes de sufrir interrogatorios por parte de personas del régimen de Ceacescu siempre recitaba poesía para sí misma. "Me daba mucha fuerza", ha apostillado. La novelista también ha subrayado que la Literatura es lo que mejor le ha ayudado a conocer de qué va la vida, su principal preocupación desde muy joven, y ha apuntado que la lengua no es la patria.
La autora asegura que actualmente no se sabe muy bien hacia dónde se dirige Rumanía, muy lastrada por la crisis económica y la corrupción política, además de por su historia reciente. La Premio Nobel también ha hablado de represión en otros países, y de cómo éstos usan el lenguaje con fines perversos: "Raúl y Fidel Castro tienen una lengua florida, y esto me produce una presión en la boca del estómago que me da una sensación horrible".
Sin embargo, Müller ha defendido que las ideologías no usan metáforas muy trabajadas, sino conceptos "duros y secos", a diferencia de los escritores. El lenguaje de Müller, ha argumentado, está lleno de la sensualidad y las metáforas del rumano, así como de sus supersticiones y su dureza pese a escribir en alemán, ya que para ella el idioma germano no tiene todas estas cosas: "Cuando escribo quiero todo esto".
(Fue el pasado diciembre, en Guadalajara, cuando hiciste cola para conseguir su nombre estampado en un ejemplar de la novela "Todo lo que tengo lo llevo conmigo", compraste dos por que un amigo te pidió si no una dedicatoria, su caligrafía 'Herta Müller', una palabra dulce y otra austera que combinadas te suenan a nombre de poeta. Cuando le prestaste tu ejemplar a Margarita, te dijo que era una historia tan dolorosa que nadie creería que eso pasó hace décadas. Tienes presente la sonrisa de la narradora cuando le dijiste "Gracias", "Gracias", por que llevabas contigo dos veces su nombre. Nota reproducida de El Cultural en línea.)
sábado, 30 de junio de 2012
viernes, 29 de junio de 2012
Merkel y el espíritu europeo
Madame ha sido objeto de reconfiguración de imagen en diarios y revistas europeos que la develan como la nueva dama de hierro. Foto reproducida de Público en línea. |
Terrorismo en Tamaulipas, México
Joseph Brodsky (1940/1996)
Compartí mi celda con una fiera salvaje,
escribí en la mazmorra mi nombre con un clavo
ardiente,
viví en el mar, jugué a la ruleta rusa,
vestido de frac comí con quién sabe quién.
Desde la punta de un témpano divisé medio mundo,
fui azotado dos veces, tres veces casi me ahogo.
Abandoné el país que me vio crecer.
Con los que me han olvidado se puede poblar una
ciudad.
Deambulé por estepas parecidas a los gemidos de los
hunos,
vestí lo que cada día se pone de moda,
sembré centeno, cubrí con cartón negro el granero
y bebí toda clase de agua.
Introduje la mirada azulada al convoy de mis sueños,
tragué el pan del exilio, sin dejar boronas.
Permití a mis ataduras todos los sonidos, excepto el
aullido,
me convertí en murmullo. Ahora tengo cuarenta años.
¿Qué puedo decir de la vida? Que resultó muy larga.
Sólo soy solidario con los sufrimientos,
por ahora no me han llenado la boca de arcilla,
de ella sólo se escucharán agradecimientos.
24 de mayo de 1980
(texto tomado de El instante maravilloso, poesía rusa del siglo XX, ed. UNAM, 2004, col. Poemas y ensayos, selección, traducción, introdución y notas de Jorge Bustamante García.)
escribí en la mazmorra mi nombre con un clavo
ardiente,
viví en el mar, jugué a la ruleta rusa,
vestido de frac comí con quién sabe quién.
Desde la punta de un témpano divisé medio mundo,
fui azotado dos veces, tres veces casi me ahogo.
Abandoné el país que me vio crecer.
Con los que me han olvidado se puede poblar una
ciudad.
Deambulé por estepas parecidas a los gemidos de los
hunos,
vestí lo que cada día se pone de moda,
sembré centeno, cubrí con cartón negro el granero
y bebí toda clase de agua.
Introduje la mirada azulada al convoy de mis sueños,
tragué el pan del exilio, sin dejar boronas.
Permití a mis ataduras todos los sonidos, excepto el
aullido,
me convertí en murmullo. Ahora tengo cuarenta años.
¿Qué puedo decir de la vida? Que resultó muy larga.
Sólo soy solidario con los sufrimientos,
por ahora no me han llenado la boca de arcilla,
de ella sólo se escucharán agradecimientos.
24 de mayo de 1980
(texto tomado de El instante maravilloso, poesía rusa del siglo XX, ed. UNAM, 2004, col. Poemas y ensayos, selección, traducción, introdución y notas de Jorge Bustamante García.)
jueves, 28 de junio de 2012
Marina Tsvetáieva (1892/1941 )
Versos para Ajmátova
Entrégame el sol en la altura,
Las estrellas en tu puño caben.
Yo entraría en ti, como el viento,
Si tu alma se abriera para mí.
Y balbucear, y enojarse,
Y de pronto bajar los ojos,
Y sollozando calmarse
Como un niño al que perdonan.
2 de junio de 1916
Besar la frente es quitar la inquietud.
Beso la frente.
Besar los ojos es quitar el insomnio.
Beso los ojos.
Besar los labios para embriagarlos.
Beso los labios.
Besar la frente es limpiar la memoria.
Beso la frente.
5 de junio de 1917
(textos tomados de El instante maravilloso, poesía rusa del siglo XX, ed. UNAM, 2004, selección, traducción y notas de Jorge Bustamante García, México, col.Poemas y Ensayos.)
Entrégame el sol en la altura,
Las estrellas en tu puño caben.
Yo entraría en ti, como el viento,
Si tu alma se abriera para mí.
Y balbucear, y enojarse,
Y de pronto bajar los ojos,
Y sollozando calmarse
Como un niño al que perdonan.
2 de junio de 1916
Besar la frente es quitar la inquietud.
Beso la frente.
Besar los ojos es quitar el insomnio.
Beso los ojos.
Besar los labios para embriagarlos.
Beso los labios.
Besar la frente es limpiar la memoria.
Beso la frente.
5 de junio de 1917
(textos tomados de El instante maravilloso, poesía rusa del siglo XX, ed. UNAM, 2004, selección, traducción y notas de Jorge Bustamante García, México, col.Poemas y Ensayos.)
miércoles, 27 de junio de 2012
Gobiernos panistas y sida
Londres— Los Gobiernos de todo el mundo han fracasado en su lucha contra la droga y sus acciones en este sentido han provocado una pandemia de sida entre los drogadictos, según concluye un informe publicado hoy por un laboratorio de ideas.
El estudio "La guerra contra la droga y el VIH/Sida: cómo la criminalización del uso de drogas alimenta la pandemia global" ha sido elaborado por la Comisión Global de Política sobre Drogas, y entre sus firmantes figuran seis expresidentes de países como Colombia, Brasil, México o Chile, el antiguo ministro español y ex alto funcionario de la UE Javier Solana y el escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa.
Su publicación se produce un mes antes de la Conferencia Mundial sobre el Sida, que reunirá al mayor número de expertos en esta enfermedad en Washington entre el 22 y el 27 de julio.
En su informe, la comisión califica la lucha global contra la droga de "fracaso" por encarcelar a drogadictos
no violentos y alejarles de los sistemas públicos de salud, lo que ha aumentado los contagios del VIH, cuya causa principal es el uso compartido de jeringuillas.
Los expertos critican duramente el "fracaso notable de las políticas de lucha contra la droga" en la reducción del suministro mundial de opiáceos ilegales como la heroína, cuya oferta ha aumentado el 380 por ciento entre 1980 y 2010, mientras que sus precios siguen una tendencia a la baja, según datos de la comisión.
El informe arremete contra Estados Unidos, China, Rusia y Tailandia por "ignorar la evidencia científica y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y resistirse a la implementación de programas de prevención del VIH" , lo que ha dado pie a "consecuencias devastadoras" .
Según los datos de este grupo de expertos, una cuarta parte de los estadounidenses infectados por el VIH pasan por instalaciones penitenciarias al menos una vez al año.
Por el contrario, el documento alaba la actuación de países como Australia, Portugal o Suiza, en los que "la adicción se trata como un problema de salud" y en donde el contagio del VIH entre drogadictos casi se ha eliminado.
La lucha contra la droga también ha espoleado el crimen organizado, denuncia el informe, que subraya que desde 2006 la guerra de las fuerzas de seguridad mexicanas contra los cárteles de la droga se ha cobrado la vida de unas 50 mil personas y ha causado 10 mil desapariciones.
Sin embargo, esta acción no ha frenado la producción de heroína mexicana, que aumentó el 340 por ciento en la última década, apuntan los autores, entre los que figuran los e xpresidentes César Gaviria (Colombia) , Ernesto Zedillo (México) , Fernando Henrique Cardoso (Brasil) y Ricardo Lagos (Chile) .
En su lugar, proponen reformas que "rompan el tabú" , como sustituir la pena de cárcel por atención sanitaria y programas de desintoxicación a aquellos que lo necesiten.
Otras medidas serían la despenalización del cannabis, el acceso a jeringas estériles, salas de inyección higiénicas y programas de prescripción de heroína.
(He aquí otra de las carambolas urdidas por los gobiernos del Partido Acción Nacional en México: la multiplicación de los pacientes sidosos en los centros de rehabilitación social, el crecimiento exponencial de los consumidores de drogas duras, los más de 60 mil muertos en la "cruzada" particular de FCH, sin considerar las muertes "colaterales" y las "narcofosas" o fosas clandestinas; más la protección a capos que financiaron y financian sus campañas. Nota de la agencia Efe en el Diario de Juárez.)
El estudio "La guerra contra la droga y el VIH/Sida: cómo la criminalización del uso de drogas alimenta la pandemia global" ha sido elaborado por la Comisión Global de Política sobre Drogas, y entre sus firmantes figuran seis expresidentes de países como Colombia, Brasil, México o Chile, el antiguo ministro español y ex alto funcionario de la UE Javier Solana y el escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa.
Su publicación se produce un mes antes de la Conferencia Mundial sobre el Sida, que reunirá al mayor número de expertos en esta enfermedad en Washington entre el 22 y el 27 de julio.
En su informe, la comisión califica la lucha global contra la droga de "fracaso" por encarcelar a drogadictos
no violentos y alejarles de los sistemas públicos de salud, lo que ha aumentado los contagios del VIH, cuya causa principal es el uso compartido de jeringuillas.
Los expertos critican duramente el "fracaso notable de las políticas de lucha contra la droga" en la reducción del suministro mundial de opiáceos ilegales como la heroína, cuya oferta ha aumentado el 380 por ciento entre 1980 y 2010, mientras que sus precios siguen una tendencia a la baja, según datos de la comisión.
El informe arremete contra Estados Unidos, China, Rusia y Tailandia por "ignorar la evidencia científica y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y resistirse a la implementación de programas de prevención del VIH" , lo que ha dado pie a "consecuencias devastadoras" .
Según los datos de este grupo de expertos, una cuarta parte de los estadounidenses infectados por el VIH pasan por instalaciones penitenciarias al menos una vez al año.
Por el contrario, el documento alaba la actuación de países como Australia, Portugal o Suiza, en los que "la adicción se trata como un problema de salud" y en donde el contagio del VIH entre drogadictos casi se ha eliminado.
La lucha contra la droga también ha espoleado el crimen organizado, denuncia el informe, que subraya que desde 2006 la guerra de las fuerzas de seguridad mexicanas contra los cárteles de la droga se ha cobrado la vida de unas 50 mil personas y ha causado 10 mil desapariciones.
Sin embargo, esta acción no ha frenado la producción de heroína mexicana, que aumentó el 340 por ciento en la última década, apuntan los autores, entre los que figuran los e xpresidentes César Gaviria (Colombia) , Ernesto Zedillo (México) , Fernando Henrique Cardoso (Brasil) y Ricardo Lagos (Chile) .
En su lugar, proponen reformas que "rompan el tabú" , como sustituir la pena de cárcel por atención sanitaria y programas de desintoxicación a aquellos que lo necesiten.
Otras medidas serían la despenalización del cannabis, el acceso a jeringas estériles, salas de inyección higiénicas y programas de prescripción de heroína.
(He aquí otra de las carambolas urdidas por los gobiernos del Partido Acción Nacional en México: la multiplicación de los pacientes sidosos en los centros de rehabilitación social, el crecimiento exponencial de los consumidores de drogas duras, los más de 60 mil muertos en la "cruzada" particular de FCH, sin considerar las muertes "colaterales" y las "narcofosas" o fosas clandestinas; más la protección a capos que financiaron y financian sus campañas. Nota de la agencia Efe en el Diario de Juárez.)
martes, 26 de junio de 2012
Última cena fast food
El diseñador gráfico Rafael Andrés, alias The Raf, ha recreado con humor a autores clásicos como Tiziano, Miguel Ángel y Rafael, obras que ahora expone en Bangkok. Si observo con detenimiento la obra aquí reproducida, juraría que el gato y el perro esperan las migajas de la última cena de hamburguesas y coca-colas con hielitos. Información e ilustración en El Mundo on line. |
Una parvada de poemas
El festival de poesía más multitudinario de la historia, el Poetry Parnassus de Londres, inaugurará con el sexto bombardeo de poemas del colectivo chileno Casagrande liderado por los poetas Cristóbal Bianchi, Julio Carrasco y José Joaquín Prieto en colaboración con el Southbank Center: cien mil marcapáginas con 300 poemas de 300 poetas contemporáneos de 200 países caerán a las 21 horas del 26 de junio de 2012. Los poemas serán lanzados desde un helicóptero sobre el parque Jubilee Garden en el centro de Londres.
La intervención incluye poemas de 70 poetas en castellano provenientes de Chile, Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragüa, Panamá, Perú, Puerto Rico, España, Uruguay y Venezuela.
Algunos de los poeta son: Christian Aedo, Claribel Alegría, Andrés Anwandter, Santiago Barcaza, Gustavo Barrera, Gioconda Belli, Javier Bello, Camilo Brodsky, Juan Carreño, Rocío Cerón, Lucy Cristina Chau, Lia Colombino, Bruno Cuneo, Vanessa Droz, Julio Espinosa, Héctor Figueroa, Andrés Florit, Cristian Gómez, Marcelo Guajardo, Victoria Guerrero, Raúl Henao, Carlos Henrickson, Antonia Hernández, Jaime Huenún, Paulo Huirimilla Oyarzo, Ana Istarú, José-Pablo Jofré, Carmen Matute, Adán Méndez, Hernán Miranda, Roxana Miranda Rupailaf, Melisa Machado, Rodrigo Olavarría, Mayra Oyuela, Marcela Parra, Marcelo Pellegrini, Pedro Pérez Sarduy, Beverly Pérez Rego, David Preiss, María Soledad Quiroga, Alejandra del Río, Matías Rivas, Juan Cristóbal Romero, Mirta Rosenberg, Úrsula Starke, Eli Tolaretxipi, Antonia Torres, Macarena Urzúa y Santiago Vizcaíno.
También caerán del cielo poemas de importantes invitados al festival como Jo Shapcott (Gran Bretaña), el Nobel Seamus Heaney (Irlanda), Wole Soyinka (Nigeria), al laureado Kay Ryan (USA) y Bill Manhire (Nueva Zelanda).
El primer bombardeo de Casagrande se realizó en Santiago de Chile sobre el palacio del gobierno, La Moneda (2001); le siguieron: Dubrovnik (2002), Guernica (2004), Varsovia (2009) y Berlín (2010).
En el marco de los Juegos Olímpicos 2012 y organizado por el Southbank Center del 26 de junio al 1° de julio de 2012, en el festival Poetry Parnassus participarán poetas, raperos, performers o cantautores de las 204 naciones olímpicas y presentarán su obra en más de 50 idiomas, incluyendo: Goun (Benín), Wolof (Gambia), Amharico (Etiopía), Criollo Haitiano, Maorí y Kazako.
Inspirándose en el Monte Parnaso de Grecia, tierra mítica y espiritual de la poesía, hogar de Orfeo y lugar de residencia de la musa poesía, el Poetry Parnassus se hace eco de las Epinicianas, poesías encargadas como parte de los antiguos Juegos Olímpicos.
(¿No es muy descabellado suponer que la idea de lanzar poemas desde un artefacto aéreo, en Chile, haya surgido a raíz de la aparición de una de las mejores novelas de Roberto Bolaño, "Estrella distante", aparecida en el año 1996, en que el personaje principal, un nazi, "escribía" versos en el aire? Nota en Abc en línea. Dibujo en "archivo bolaño".)
lunes, 25 de junio de 2012
Despensas envenenadas
Durango, Dgo.- Una familia originaria del municipio de Guanaceví se intoxicó al consumir alimentos preparados en su propio hogar, lo que provocó la muerte de una niña de 7 años; los afectados afirman que enfermaron luego de consumir una pasta que autoridades estatales les entregaron en una despensa.
Autoridades locales, por su parte, sostienen que el fallecimiento se debió al consumo de hongos tóxicos propios de la región en que habitan los afectados.
El incidente ocurrió el viernes 22: Francisca Valles Núñez,de 53 años, quien permanece grave en un hospital, cocinó una de las pastas contenidas en la despensa que recibió el martes 19, como parte de la cruzada Una Gota de Ayuda para Durango.
Ese programa, basado en donativos de empresas y ciudadanos, es impulsado por el gobierno estatal para contrarrestar las consecuencias de la sequía.
El esposo de Francisca, Manuel Anaya Muñoz, y su nieta Estrella Amaya Valles, así como dos perros que tienen como mascotas, consumieron el producto ya cocinado.
Los canes murieron y el resto de los adultos perdió el conocimiento; sin embargo, el varón despertó horas después y auxilió a ambas mujeres.
No obstante, en el traslado hacia un hospital falleció la menor, de 7 años. Hasta el momento, Francisca Valles ha sufrido tres infartos y su estado de salud es crítico.
La tía de la pequeña que murió, Erika Anaya, aseguró que a la pasta únicamente se le añadió un condimento de tomate, pues “aún no es temporada de hongos en la región”.
Al respecto, el secretario de Salud estatal, Alejandro Campa Avitia, afirmó que lo que provocó la intoxicación fueron hongos tóxicos, y no “una sopa”, como afirmó la familia afectada. Ese, aseguró, fue el diagnóstico clínico de los afectados.
De lo contrario, abundó el funcionario estatal, serían más los afectados y no únicamente la familia asentada en una ranchería de Guanaceví.
(Es frecuente que las despensas -"dádivas"- que regalan los partidos políticos en las campañas se entreguen después de que caducaron, al igual que medicinas, se han conocido casos de latas de atún y portolas que luego de consumidas produzcan intoxicaciones masivas que se presentan en erupciones de la piel y labios reventados. Lo mismo se registra en supermercados como Soriana, Walmart, Sam's y Aurrerá, que expenden productos envasados como pan de caja, catsup, tortillas de harina, etcétera, en vísperas de su caducidad. Aquí la justificante es que el público consumidor carece de la cultura de verificar la fecha. Nota de la agencia Apro en línea.)
Autoridades locales, por su parte, sostienen que el fallecimiento se debió al consumo de hongos tóxicos propios de la región en que habitan los afectados.
El incidente ocurrió el viernes 22: Francisca Valles Núñez,de 53 años, quien permanece grave en un hospital, cocinó una de las pastas contenidas en la despensa que recibió el martes 19, como parte de la cruzada Una Gota de Ayuda para Durango.
Ese programa, basado en donativos de empresas y ciudadanos, es impulsado por el gobierno estatal para contrarrestar las consecuencias de la sequía.
El esposo de Francisca, Manuel Anaya Muñoz, y su nieta Estrella Amaya Valles, así como dos perros que tienen como mascotas, consumieron el producto ya cocinado.
Los canes murieron y el resto de los adultos perdió el conocimiento; sin embargo, el varón despertó horas después y auxilió a ambas mujeres.
No obstante, en el traslado hacia un hospital falleció la menor, de 7 años. Hasta el momento, Francisca Valles ha sufrido tres infartos y su estado de salud es crítico.
La tía de la pequeña que murió, Erika Anaya, aseguró que a la pasta únicamente se le añadió un condimento de tomate, pues “aún no es temporada de hongos en la región”.
Al respecto, el secretario de Salud estatal, Alejandro Campa Avitia, afirmó que lo que provocó la intoxicación fueron hongos tóxicos, y no “una sopa”, como afirmó la familia afectada. Ese, aseguró, fue el diagnóstico clínico de los afectados.
De lo contrario, abundó el funcionario estatal, serían más los afectados y no únicamente la familia asentada en una ranchería de Guanaceví.
(Es frecuente que las despensas -"dádivas"- que regalan los partidos políticos en las campañas se entreguen después de que caducaron, al igual que medicinas, se han conocido casos de latas de atún y portolas que luego de consumidas produzcan intoxicaciones masivas que se presentan en erupciones de la piel y labios reventados. Lo mismo se registra en supermercados como Soriana, Walmart, Sam's y Aurrerá, que expenden productos envasados como pan de caja, catsup, tortillas de harina, etcétera, en vísperas de su caducidad. Aquí la justificante es que el público consumidor carece de la cultura de verificar la fecha. Nota de la agencia Apro en línea.)
domingo, 24 de junio de 2012
NADIE SABE
Sé que cuando me veas
dirás que yo no soy yo.
Sé que cuando me encuentre
contigo diré que no eres aquél.
Sé que me observarás con
ojos de lupa, con labios desconfiados.
Sé que me clavaré viéndote
como si buscara al niño que no.
Sé que mirarás mis lonjas, las canas,
los anteojos empañados, la incredulidad.
Sé que me quedaré de una pieza
como cuando cae el telón y reina el silencio.
Sé que para ti seré un espectro,
que el alcohol, el tabaco, los años, el hígado.
Por eso no quieres verme, sé que abrirás
el anuario, que caerá luego en llamas.
dirás que yo no soy yo.
Sé que cuando me encuentre
contigo diré que no eres aquél.
Sé que me observarás con
ojos de lupa, con labios desconfiados.
Sé que me clavaré viéndote
como si buscara al niño que no.
Sé que mirarás mis lonjas, las canas,
los anteojos empañados, la incredulidad.
Sé que me quedaré de una pieza
como cuando cae el telón y reina el silencio.
Sé que para ti seré un espectro,
que el alcohol, el tabaco, los años, el hígado.
Por eso no quieres verme, sé que abrirás
el anuario, que caerá luego en llamas.
sábado, 23 de junio de 2012
"Etilio" se va, se va
Guadalajara— Unas 5 mil personas impusieron hoy en Jalisco el Récord Guinness a la “mentada de madre” más grande del mundo, una de las mayores ofensas para los mexicanos, que ahora abre una nueva categoría en este libro.
El récord se logró después de que los habitantes superaran los 122 decibelios de ruido, al gritar al unísono “Emilio, chingas a tu madre”, en referencia al gobernador del estado de Jalisco, Emilio González Márquez.
Jaime Hérnandez, representante de la Asamblea de Redes y Movimientos Sociales, una de las organizaciones convocantes, afirmó que esta es la primera vez que un grupo de ciudadanos se reúne para “mentar la madre”, por lo que se impondrá también esta nueva categoría en el libro de los Récord Guinness.
Hasta ahora no se tenía registro de ningún récord de esta índole, por lo que Récord Guinness estableció un parámetro mínimo de 120 decibelios del que los organizadores pudieran partir para dejar la marca, hasta que esta sea superada.
La reunión para imponer la marca fue promovida por organizaciones civiles con la intención de “despedir” al gobernador, que este año concluirá su mandato de seis años.
En abril de 2008, durante un evento público, González Márquez insultó con un “Chinguen a su madre” a quienes lo criticaron por donar 90 millones de pesos (6,5 millones de dólares) para la construcción de una Iglesia católica.
Durante su mandato, el gobernante se vio envuelto en diversas polémicas al declarar que los matrimonios entre homosexuales le daban “asquito” y al mostrarse contra la posibilidad de que estos puedan adoptar un hijo.
Las organizaciones civiles realizaron antes una manifestación que llegó hasta el palacio de Gobierno, en el que mostraron mantas con frases como “Emilio, me saludas a la tuya” para protestar lo que consideraron “el mal gobierno” de González Márquez.
Las pruebas y el registro de la “mentada” se enviarán a representantes de Récord Guinness para que elaboren y envíen el registro oficial de la marca en las próximas semanas.
(Si fuese necesario hacer un catálogo de esperpentos panistas se ocuparían cientos de páginas, la misma suerte correrían los priístas, perredistas y las demás alianzas que asuelan a este país. Nota de Efe en el Diario de Juárez en línea.)
El récord se logró después de que los habitantes superaran los 122 decibelios de ruido, al gritar al unísono “Emilio, chingas a tu madre”, en referencia al gobernador del estado de Jalisco, Emilio González Márquez.
Jaime Hérnandez, representante de la Asamblea de Redes y Movimientos Sociales, una de las organizaciones convocantes, afirmó que esta es la primera vez que un grupo de ciudadanos se reúne para “mentar la madre”, por lo que se impondrá también esta nueva categoría en el libro de los Récord Guinness.
Hasta ahora no se tenía registro de ningún récord de esta índole, por lo que Récord Guinness estableció un parámetro mínimo de 120 decibelios del que los organizadores pudieran partir para dejar la marca, hasta que esta sea superada.
La reunión para imponer la marca fue promovida por organizaciones civiles con la intención de “despedir” al gobernador, que este año concluirá su mandato de seis años.
En abril de 2008, durante un evento público, González Márquez insultó con un “Chinguen a su madre” a quienes lo criticaron por donar 90 millones de pesos (6,5 millones de dólares) para la construcción de una Iglesia católica.
Durante su mandato, el gobernante se vio envuelto en diversas polémicas al declarar que los matrimonios entre homosexuales le daban “asquito” y al mostrarse contra la posibilidad de que estos puedan adoptar un hijo.
Las organizaciones civiles realizaron antes una manifestación que llegó hasta el palacio de Gobierno, en el que mostraron mantas con frases como “Emilio, me saludas a la tuya” para protestar lo que consideraron “el mal gobierno” de González Márquez.
Las pruebas y el registro de la “mentada” se enviarán a representantes de Récord Guinness para que elaboren y envíen el registro oficial de la marca en las próximas semanas.
(Si fuese necesario hacer un catálogo de esperpentos panistas se ocuparían cientos de páginas, la misma suerte correrían los priístas, perredistas y las demás alianzas que asuelan a este país. Nota de Efe en el Diario de Juárez en línea.)
Bilis negra como Fado
Siempre tuve cierta resistencia a la palabra “melancolía” desde que un profesor de Latín explicó en clase su etimología: quiere decir “bilis negra”. Pero no encuentro otra manera de definir mi estado de estos días. Me reconcilio con la palabra (y con mi sentimiento), escuchando la canción de Silvio Rodríguez: “Hoy la voluble señorita es amistad / y acaricia finalmente el corazón / con su más delgado pétalo de hielo”.
A veces tengo la certeza de que ya no me voy a enamorar, e incluso dudo de haber estado enamorado alguna vez. Trato de no hacer caso a las patrañas de la numerología, según la cual mi número es el 9, “el Eremita”, pero no puedo evitar la idea de que si el arquetipo existe, alguien lo tiene que encarnar. ¿No seré yo un ermitaño no asumido? Ayer leí “La solitude des gays” (La soledad de los gays *), un artículo del escritor francés Didier Lestrade. A pesar de lo triste del tema, tras leerlo sentí cierto alivio, me llevó a pensar que mi soledad no es sino un mal de los tiempos que corren. Lestrade cuenta que mientras se dedicaba a hacer tareas de jardinería en su casa, se quebró una pierna. Como vive solo, se arrastró por el jardín hasta que sus gritos para pedir auxilio pudieron llegar hasta la casa de un vecino. A raíz de este episodio, reflexiona que los gays estamos cada vez más solos, que ya no existe el levante callejero, que cuanto más medios tenemos para relacionarnos gracias a las redes sociales de Internet, menos nos encontramos. Y menciona a los que tienen 30 o 35 años y se preguntan: “Si no soy capaz de tener una historia de amor ahora, ¿cómo voy a hacer para tener una cuando tenga 40 o 45?”. Yo ya tengo 46. Sin embargo, muy en el fondo, no pierdo las esperanzas. “Pienso –sigue Lestrade– que todo lo que uno hace en la vida es, por supuesto, para sí, pero sobre todo para mostrárselo a la persona que uno ama. Una casa, un departamento, un jardín, un traje, una cadena de oro, unos músculos, es lo que uno prepara antes que el enamorado llegue, para mostrarle los pequeños detalles de lo que a uno le gusta y para descubrir los pequeños detalles de lo que le gusta al otro. Edificás una carrera, creás una obra de arte o incluso hacés una riquísima tarta de ciruelas; si no tenés a quién ofrecérselo, no es más que un mensaje en una botella que se pierde en el mar.” Me sentí identificado: el departamento que alquilo y me queda un poco grande, me esfuerzo para mejorar mi vida y mi trabajo, voy al gimnasio para mantenerme lo más saludable posible... Según Victor Hugo, la melancolía es “la dicha de estar triste”. Y Silvio sigue cantando: “Oh, melancolía, rosa del aliento, dime quién me puede amar”.
(Cuando abandonaste la ciudad de México para regresar a la estéril provincia norteña -después de los terremotos de 1985- un amigo te reveló que aquello que arrojabas entre sueños era "bilis negra", una especie de trastorno hepático, que un buen día derivó en hepatitis A, tastorno que, a su vez, te aclaró el acupunturista, "te salvó de cirrosis"... Revelación que te puso fríos los huevos, por decir lo menos. Nota de Pablo Pérez, "Oh, melancolía", clonada del suplemento "soy", Página/12, Buenos Aires, en línea.)
A veces tengo la certeza de que ya no me voy a enamorar, e incluso dudo de haber estado enamorado alguna vez. Trato de no hacer caso a las patrañas de la numerología, según la cual mi número es el 9, “el Eremita”, pero no puedo evitar la idea de que si el arquetipo existe, alguien lo tiene que encarnar. ¿No seré yo un ermitaño no asumido? Ayer leí “La solitude des gays” (La soledad de los gays *), un artículo del escritor francés Didier Lestrade. A pesar de lo triste del tema, tras leerlo sentí cierto alivio, me llevó a pensar que mi soledad no es sino un mal de los tiempos que corren. Lestrade cuenta que mientras se dedicaba a hacer tareas de jardinería en su casa, se quebró una pierna. Como vive solo, se arrastró por el jardín hasta que sus gritos para pedir auxilio pudieron llegar hasta la casa de un vecino. A raíz de este episodio, reflexiona que los gays estamos cada vez más solos, que ya no existe el levante callejero, que cuanto más medios tenemos para relacionarnos gracias a las redes sociales de Internet, menos nos encontramos. Y menciona a los que tienen 30 o 35 años y se preguntan: “Si no soy capaz de tener una historia de amor ahora, ¿cómo voy a hacer para tener una cuando tenga 40 o 45?”. Yo ya tengo 46. Sin embargo, muy en el fondo, no pierdo las esperanzas. “Pienso –sigue Lestrade– que todo lo que uno hace en la vida es, por supuesto, para sí, pero sobre todo para mostrárselo a la persona que uno ama. Una casa, un departamento, un jardín, un traje, una cadena de oro, unos músculos, es lo que uno prepara antes que el enamorado llegue, para mostrarle los pequeños detalles de lo que a uno le gusta y para descubrir los pequeños detalles de lo que le gusta al otro. Edificás una carrera, creás una obra de arte o incluso hacés una riquísima tarta de ciruelas; si no tenés a quién ofrecérselo, no es más que un mensaje en una botella que se pierde en el mar.” Me sentí identificado: el departamento que alquilo y me queda un poco grande, me esfuerzo para mejorar mi vida y mi trabajo, voy al gimnasio para mantenerme lo más saludable posible... Según Victor Hugo, la melancolía es “la dicha de estar triste”. Y Silvio sigue cantando: “Oh, melancolía, rosa del aliento, dime quién me puede amar”.
(Cuando abandonaste la ciudad de México para regresar a la estéril provincia norteña -después de los terremotos de 1985- un amigo te reveló que aquello que arrojabas entre sueños era "bilis negra", una especie de trastorno hepático, que un buen día derivó en hepatitis A, tastorno que, a su vez, te aclaró el acupunturista, "te salvó de cirrosis"... Revelación que te puso fríos los huevos, por decir lo menos. Nota de Pablo Pérez, "Oh, melancolía", clonada del suplemento "soy", Página/12, Buenos Aires, en línea.)
viernes, 22 de junio de 2012
Juan Rulfo el cliché
La argentina Reina Roffé publica su tercer libro sobre Juan Rulfo desde 1973, cuando aún vivía el biografiado. Sin duda esta biografía “no autorizada” es lo mejor que se podía hacer en este terreno sobre Rulfo, porque la autora no busca sólo erudición (que hay mucha) sino un tono literario o perspectiva literaria, que haga amena la lectura, que lo es, si uno tiene algún interés por ese narrador exiguo, mágico y mentiroso ( otros agregarían y depresivo) que se llamó Juan Rulfo (1917-1986).
Juan Rulfo (su nombre inicial fue Juan Pérez, Rulfo era un apellido que adoptó de su lado materno) nació en tierras de Jalisco (México) en plena Revolución. Pertenecía a una familia criolla que había tenido bienes, pero que esa Revolución y la contrarrevolución “cristera” asoló o depauperó. El padre de Rulfo murió asesinado y la madre optó por enviar al chico a un internado u orfanato, que como el escritor maduro dijo una vez, me sirvió “para aprender a deprimirme”. Parte del “misterio Rulfo” (llámemoslo así) tiene que ver con una infancia y primera mocedad desdichadas, que logran un muchacho muy amante de la lectura, pero introvertido, tímido y un tanto patológicamente silencioso. Rulfo nunca fue a la Universidad, resultó un claro autodidacta, que durante muchos años trabajó en lo que iba saliendo, como ser vendedor de llantas de automóviles... Todos dicen que nació en Apulco, pero él solía decir que en el cercano pueblo de San Gabriel y fue registrado en Sayula. A Juan le gustaba en todo liar un poco y su biografía juvenil se presta admirablemente para ello. Como fuere, de todos esos pueblos y de la lucha “cristera” en Jalisco, saldrá el clima de sus dos casi únicos libros que terminaron haciéndole famosísimo. Como alguien dijo (no recuerdo si mezclando también a Salinger) unos son famosos por lo que escriben y otros por lo que no escriben.
Tal es el caso de Rulfo que, pese a ello, siempre aceptó vivir como un escritor ( y al fin muy homenajeado), es decir, como alguien que si en ese momento no escribía, podría volver a hacerlo en cualquier instante. Hora que nunca llegó. Juan Rulfo -los amigos lo llamaban “Juanito” y decían que en la intimidad podía ser muy hablador- será siempre el autor de dos libros narrativos excelentes: el libro de cuentos (algunos se publicaron en revistas ya en los 40) El llano en llamas (1953) y la novela, medio mágica, Pedro Páramo de 1955. Claro está que en ese momento los libros tuvieron un éxito relativo que, a partir de los mediados años 60, se fue extendiendo e incrementando con nuevas ediciones y múltiples traducciones hasta devenir clásicos, lo que al tímido Rulfo debió halagar tanto como fastidiar, pues según decía su suma aspiración era la tranquilidad. Rulfo escribió algún fragmento más: Un pedazo de noche (1959), el fragmento de una novela futura, algún guión de cine como El gallo de oro (llevado al cine con otro título por Arturo Ripstein) y póstumamente la colección de cartas de noviazgo con su luego mujer, Clara, que era una muchachita cuando la conoció. (Dicen que, ya en los 70, el poco faldero Rulfo, tuvo alguna relación con otra mocita argentina que, al parecer, podría vivir ahora en Madrid.) Pero Rulfo, a quien Reina Roffé termina llamando “el hijo inconsolable del desaliento”, fue siempre el secreto de su bloqueo como escritor, lo excepcional de sus dos libros (pioneros del “boom”), su afición temprana a la fotografía -otra de sus habilidades que se conoció tarde- su afán por inventar y tergiversar (alguien le pidió escribir lo que hablaba entre amigos, se negó.) y su relación cordial, a ráfagas, con amigos tempranos como Juan José Arreola -algo competidor desde lo distinto- o el académico Antonio Alatorre, y su falta de simpatía (mutua) con Octavio Paz, seres caracteriológicamente en las antípodas...
Reservado, huidizo, alcohólico muchos años hasta curarse de la adicción, que quedó en cigarrillos y coca-cola, el personaje más parecido a Rulfo (nada amante de fastos ni de trepadores) en la novela latinoamericana, es el uruguayo Juan Carlos Onetti. Se profesaron simpatía aunque coincidieron poco. Rulfo murió de cáncer en su casa del D.F. a pricipios de enero de 1986. Había renacido un mito. Pero hay muchas más cosas y Reina Roffé las narra muy bien.
(La imagen más viva que tienes de Rulfo es aquel mediodía que salías de la librería El Ágora, en Insurgentes y Río Mixcoac, al fondo estaban charlando cada uno con un café Günther Grass y el autor de "Macario"; después otra imagen en el mismo lugar: llega el escritor mientras tú estás junto al cajero de la librería, esperas que te cobren un ejemplar de "Mal de piedra", de Carlos Montemayor, y ves que Rulfo se clava en la portada del libro que ya te han cobrado. Pero lo dejas con la palabra en la boca. Hay varias imprecisiones en esta reseña, sólo mencionarás dos: la primera versión de "El gallo de oro" es de Roberto Gavaldón, 1964; Rulfo escribió el guión de "La fòrmula secreta", 1965, del director Rubén Gámez. Nota de Luis Antonio de Villena tomada de El Cultural, diario El Mundo en línea.)
Juan Rulfo (su nombre inicial fue Juan Pérez, Rulfo era un apellido que adoptó de su lado materno) nació en tierras de Jalisco (México) en plena Revolución. Pertenecía a una familia criolla que había tenido bienes, pero que esa Revolución y la contrarrevolución “cristera” asoló o depauperó. El padre de Rulfo murió asesinado y la madre optó por enviar al chico a un internado u orfanato, que como el escritor maduro dijo una vez, me sirvió “para aprender a deprimirme”. Parte del “misterio Rulfo” (llámemoslo así) tiene que ver con una infancia y primera mocedad desdichadas, que logran un muchacho muy amante de la lectura, pero introvertido, tímido y un tanto patológicamente silencioso. Rulfo nunca fue a la Universidad, resultó un claro autodidacta, que durante muchos años trabajó en lo que iba saliendo, como ser vendedor de llantas de automóviles... Todos dicen que nació en Apulco, pero él solía decir que en el cercano pueblo de San Gabriel y fue registrado en Sayula. A Juan le gustaba en todo liar un poco y su biografía juvenil se presta admirablemente para ello. Como fuere, de todos esos pueblos y de la lucha “cristera” en Jalisco, saldrá el clima de sus dos casi únicos libros que terminaron haciéndole famosísimo. Como alguien dijo (no recuerdo si mezclando también a Salinger) unos son famosos por lo que escriben y otros por lo que no escriben.
Tal es el caso de Rulfo que, pese a ello, siempre aceptó vivir como un escritor ( y al fin muy homenajeado), es decir, como alguien que si en ese momento no escribía, podría volver a hacerlo en cualquier instante. Hora que nunca llegó. Juan Rulfo -los amigos lo llamaban “Juanito” y decían que en la intimidad podía ser muy hablador- será siempre el autor de dos libros narrativos excelentes: el libro de cuentos (algunos se publicaron en revistas ya en los 40) El llano en llamas (1953) y la novela, medio mágica, Pedro Páramo de 1955. Claro está que en ese momento los libros tuvieron un éxito relativo que, a partir de los mediados años 60, se fue extendiendo e incrementando con nuevas ediciones y múltiples traducciones hasta devenir clásicos, lo que al tímido Rulfo debió halagar tanto como fastidiar, pues según decía su suma aspiración era la tranquilidad. Rulfo escribió algún fragmento más: Un pedazo de noche (1959), el fragmento de una novela futura, algún guión de cine como El gallo de oro (llevado al cine con otro título por Arturo Ripstein) y póstumamente la colección de cartas de noviazgo con su luego mujer, Clara, que era una muchachita cuando la conoció. (Dicen que, ya en los 70, el poco faldero Rulfo, tuvo alguna relación con otra mocita argentina que, al parecer, podría vivir ahora en Madrid.) Pero Rulfo, a quien Reina Roffé termina llamando “el hijo inconsolable del desaliento”, fue siempre el secreto de su bloqueo como escritor, lo excepcional de sus dos libros (pioneros del “boom”), su afición temprana a la fotografía -otra de sus habilidades que se conoció tarde- su afán por inventar y tergiversar (alguien le pidió escribir lo que hablaba entre amigos, se negó.) y su relación cordial, a ráfagas, con amigos tempranos como Juan José Arreola -algo competidor desde lo distinto- o el académico Antonio Alatorre, y su falta de simpatía (mutua) con Octavio Paz, seres caracteriológicamente en las antípodas...
Reservado, huidizo, alcohólico muchos años hasta curarse de la adicción, que quedó en cigarrillos y coca-cola, el personaje más parecido a Rulfo (nada amante de fastos ni de trepadores) en la novela latinoamericana, es el uruguayo Juan Carlos Onetti. Se profesaron simpatía aunque coincidieron poco. Rulfo murió de cáncer en su casa del D.F. a pricipios de enero de 1986. Había renacido un mito. Pero hay muchas más cosas y Reina Roffé las narra muy bien.
(La imagen más viva que tienes de Rulfo es aquel mediodía que salías de la librería El Ágora, en Insurgentes y Río Mixcoac, al fondo estaban charlando cada uno con un café Günther Grass y el autor de "Macario"; después otra imagen en el mismo lugar: llega el escritor mientras tú estás junto al cajero de la librería, esperas que te cobren un ejemplar de "Mal de piedra", de Carlos Montemayor, y ves que Rulfo se clava en la portada del libro que ya te han cobrado. Pero lo dejas con la palabra en la boca. Hay varias imprecisiones en esta reseña, sólo mencionarás dos: la primera versión de "El gallo de oro" es de Roberto Gavaldón, 1964; Rulfo escribió el guión de "La fòrmula secreta", 1965, del director Rubén Gámez. Nota de Luis Antonio de Villena tomada de El Cultural, diario El Mundo en línea.)
miércoles, 20 de junio de 2012
SLP: "desaparecen" a reportero
Distrito Federal— Familiares de Federico Manuel García Contreras, reportero gráfico y colaborador del programa “Voces de Mediodía” del diario El Punto Crítico, presentaron una denuncia por la desaparición del periodista en San Luis Potosí.
La hija del comunicador, Marisol García, destacó en entrevista que la denuncia fue presentada el lunes ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra Periodistas y pidió a las autoridades dar rapidez a la investigación.
Los familiares de García Contreras se trasladaron al municipio de Tanquián de Escobedo, en San Luis Potosí, donde su padre desapareció y presentaron la denuncia que dio origen a la averiguación previa AP/PGJE/SRZHN/TANQUIAN//75/2012.
En la fiscalía especial de la Procuraduría General de la República (PGR) también quedó radicado este caso en la indagatoria PGR/FEADLE/54/12.
Según las hijas del comunicador, Marisol y África Gabriela, el 13 de mayo pasado su padre salió en un autobús desde la ciudad de México hacia Tanquián; por la noche les llamó para informarles que había llegado bien y que estaba alojado en la casa de huéspedes “Aurora. Al día siguiente se volvió a comunicar con ellas para comentarles que la policía municipal le había negado el permiso para promocionar sus obras y realizar entrevistas, debido al clima de violencia que se registraba en la entidad.
Esa fue la última vez que la familia tuvo noticias del comunicador; el 23 de mayo les informaron que Aurora Liz Cano, dueña de la casa de huéspedes donde se hospedaba su padre, tenía una semana de no saber nada del periodista.
Incluso les indicaron que todas las pertenencias de Federico Manuel García estaban intactas, excepto un portafolios en el que llevaba sus agendas y el teléfono celular.
Las hijas del periodista se trasladaron al lugar, donde presentaron la denuncia correspondiente; de regreso a la ciudad de México también se presentaron una querella ante la Fiscalía de la PGR, para que se investigue y den con el paradero de García Contreras.
(¿La "desaparición" de otro periodista enrarecerá más el panorama sombrío y sórdido que con diligencia y rapidez ha construído el gobierno federal previo a las elecciones y como preámbulo del desastre que nos espera después del uno de julio 2012? No creemos que pueda recrudecerse más lo que ya está más que áspero. Veremos. Nota de Notimex en Diario de Juárez.)
La hija del comunicador, Marisol García, destacó en entrevista que la denuncia fue presentada el lunes ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra Periodistas y pidió a las autoridades dar rapidez a la investigación.
Los familiares de García Contreras se trasladaron al municipio de Tanquián de Escobedo, en San Luis Potosí, donde su padre desapareció y presentaron la denuncia que dio origen a la averiguación previa AP/PGJE/SRZHN/TANQUIAN//75/2012.
En la fiscalía especial de la Procuraduría General de la República (PGR) también quedó radicado este caso en la indagatoria PGR/FEADLE/54/12.
Según las hijas del comunicador, Marisol y África Gabriela, el 13 de mayo pasado su padre salió en un autobús desde la ciudad de México hacia Tanquián; por la noche les llamó para informarles que había llegado bien y que estaba alojado en la casa de huéspedes “Aurora. Al día siguiente se volvió a comunicar con ellas para comentarles que la policía municipal le había negado el permiso para promocionar sus obras y realizar entrevistas, debido al clima de violencia que se registraba en la entidad.
Esa fue la última vez que la familia tuvo noticias del comunicador; el 23 de mayo les informaron que Aurora Liz Cano, dueña de la casa de huéspedes donde se hospedaba su padre, tenía una semana de no saber nada del periodista.
Incluso les indicaron que todas las pertenencias de Federico Manuel García estaban intactas, excepto un portafolios en el que llevaba sus agendas y el teléfono celular.
Las hijas del periodista se trasladaron al lugar, donde presentaron la denuncia correspondiente; de regreso a la ciudad de México también se presentaron una querella ante la Fiscalía de la PGR, para que se investigue y den con el paradero de García Contreras.
(¿La "desaparición" de otro periodista enrarecerá más el panorama sombrío y sórdido que con diligencia y rapidez ha construído el gobierno federal previo a las elecciones y como preámbulo del desastre que nos espera después del uno de julio 2012? No creemos que pueda recrudecerse más lo que ya está más que áspero. Veremos. Nota de Notimex en Diario de Juárez.)
La democracia nuestra
México, D.F.- El Movimiento Progresista en Zacatecas ofreció 150 mil pesos de recompensa a ciudadanos que evidencien a funcionarios estatales en la comisión de ilíctos electorales.
En comunicado, la coalición que integran PRD, PT y Movimiento Ciudadano (MC) destacó que “se ofrecerá una recompensa de hasta 150 mil pesos y una medalla honorífica de oro para los ciudadanos que logren incautar, sorprender, retener y proporcionar información contundente para evidenciar a funcionarios que entreguen cualquier tipo de dádiva para promover el voto a favor del PRI”.
El diario Reforma detalló que la recompensa por los mapaches priistas “podría aumentar a 300 mil pesos dependiendo de la calidad de la grabación de video o audio, además de aportes fotográficos”.
“¿Qué esperas?, saca tu teléfono, cámara y video”, se exhorta a los ciudadanos de Zacatecas.
Incluso los partidos de izquierda enumeraron siete tips para facilitar la captura de mapaches electorales, como identificar a los funcionarios de primer nivel, como el oficial mayor Leroy Barragán o el contralor Guillermo Huizar, entre otros.
“En tu localidad, identifica a gente ajena que hace reuniones en casa de manera privada, apoyando a candidatos del PRI, a vehículos oficiales de gobierno entregando apoyos o si te piden acudir a un domicilio particular antes de la elección y que lleves tu credencial”.
Además se pide a la sociedad crear una red de amigos o vecinos para “agarrar y documentar en video, audios y fotos a estos delincuentes electorales corruptos”.
(Con la derrota vivida al final del sexenio de Amalia García Medina como gobernadora, los "mapaches" del PRI regresaron a su madriguera original, así que este uno de julio no habrá quien vigile la compra de votos por parte de los "perredistas" que fueron llevados con caramillo al PRD por el propio Ricardo Monreal Ávila y mantenidos en nómina hasta la caída de doña Amalia y su hija Claudia, doce años más tarde. El actual gobernador puede comprar voluntades por el doble de lo que ofrecen los sectarios que hoy día vuelven a su madriguera de minorías. Nota en Apro.)
En comunicado, la coalición que integran PRD, PT y Movimiento Ciudadano (MC) destacó que “se ofrecerá una recompensa de hasta 150 mil pesos y una medalla honorífica de oro para los ciudadanos que logren incautar, sorprender, retener y proporcionar información contundente para evidenciar a funcionarios que entreguen cualquier tipo de dádiva para promover el voto a favor del PRI”.
El diario Reforma detalló que la recompensa por los mapaches priistas “podría aumentar a 300 mil pesos dependiendo de la calidad de la grabación de video o audio, además de aportes fotográficos”.
“¿Qué esperas?, saca tu teléfono, cámara y video”, se exhorta a los ciudadanos de Zacatecas.
Incluso los partidos de izquierda enumeraron siete tips para facilitar la captura de mapaches electorales, como identificar a los funcionarios de primer nivel, como el oficial mayor Leroy Barragán o el contralor Guillermo Huizar, entre otros.
“En tu localidad, identifica a gente ajena que hace reuniones en casa de manera privada, apoyando a candidatos del PRI, a vehículos oficiales de gobierno entregando apoyos o si te piden acudir a un domicilio particular antes de la elección y que lleves tu credencial”.
Además se pide a la sociedad crear una red de amigos o vecinos para “agarrar y documentar en video, audios y fotos a estos delincuentes electorales corruptos”.
(Con la derrota vivida al final del sexenio de Amalia García Medina como gobernadora, los "mapaches" del PRI regresaron a su madriguera original, así que este uno de julio no habrá quien vigile la compra de votos por parte de los "perredistas" que fueron llevados con caramillo al PRD por el propio Ricardo Monreal Ávila y mantenidos en nómina hasta la caída de doña Amalia y su hija Claudia, doce años más tarde. El actual gobernador puede comprar voluntades por el doble de lo que ofrecen los sectarios que hoy día vuelven a su madriguera de minorías. Nota en Apro.)
martes, 19 de junio de 2012
Ecuador cobija a J. Assange
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha solicitado asilo político a Ecuador cinco días después de que el Tribunal Supremo británico desestimará el recurso presentado por sus abogados contra la sentencia que autorizó su extradición a Suecia.
Assange se personó en la sede diplomática en Londres este martes solicitando protección a través de una carta dirigida al presidente, Rafael Correa, en la que apela a la Declaración Universal de los Derechos Humanos y destaca la posibilidad de que EEUU busque juzgarle por las revelaciones de WikiLeaks.
La noticia fue confirmada desde Quito por el ministro de Exteriores, Ricardo Patiño, quien informó de que el Gobierno está estudiando la petición. Posteriormente, la propia oficina diplomática emitió un comunicado en el que explica que mientras no haya una decisión oficial al respecto, "el señor Assange podrá permanecer en la Embajada bajo protección del Gobierno ecuatoriano".
"La decisión de estudiar la solicitud de asilo del señor Assange no debe ser considerada en ningún caso un acto de interferencia de Ecuador en los procesos judiciales del Reino Unido o de Suecia", añade la nota.
La sentencia del Supremo suponía que la extradición a Suecia, donde se le acusa de dos presuntos delitos de abuso sexual de los que siempre se ha declarado inocente, tenía que hacerse efectiva antes del 28 de junio. Assange, que lleva bajo arresto domiciliario en Inglaterra 18 meses, aún puede presentar un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo para luchar contra su traslado.
La amenaza de ser extraditado a EEUU
Patiño aseguró en una rueda de prensa que "el Gobierno de Ecuador se encuentra evaluando la petición del señor Julian Assange y cualquier decisión que adopte sobre el mismo tendrá en cuenta el respeto a las normas y principios del derecho internacional, así como la tradicional política de Ecuador de velar por los derechos humanos", informa EFE.
Según el ministro, Assange asegura también en esa carta que "la persecución" de la que es "objeto en varios países deriva no solo de sus ideas y sus acciones sino de su trabajo al publicar información que compromete a los poderosos, de publicar la verdad y con ello desenmascarar corrupción y graves abusos a los derechos humanos alrededor del mundo".
"Amenazas de muerte, boicot económico y la posibilidad de ser entregado a las autoridades de EEUU por autoridades británicas, suecas o australianas, hacen que busque en territorio ecuatoriano el asilo político y la protección para permitirme continuar con mi misión en un territorio de paz", concluye la solicitud.
La primera reacción de Washington ha llegado por boca del portavoz del Departamento de Estado, William Ostick, quien en declaraciones a EFE dijo que este "es un asunto entre Suecia, Reino Unido y el propio Ecuador".
Reino Unido ya ha sido informado
Por su parte, el Ministerio de Exteriores ecuatoriano colgó otra nota en su página web, en la que informa de que Assange solicitó a Correa protección ante una “lamentable declaración efectiva de abandono recibida por las autoridades de mi país, Australia, en la cual declaran que no defenderán ni mis garantías mínimas ante ningún gobierno y delegan en la Constitución de un país extranjero que aplica la pena de muerte por el delito de espionaje y traición [...] ignorando la obligación de proteger a su ciudadano, que es perseguido políticamente".
El alegato de Assange añade que "dichas declaraciones hacen imposible mi retorno a mi país de origen y me colocan en un estado de indefensión al ser solicitado para ser interrogado por el Reino de Suecia, lugar donde sus más altos funcionarios me han atacado abiertamente, e investigado por delitos políticos en los Estados Unidos de América, un país donde la pena de muerte por dichas ofensas aún está vigente”.
Ecuador ya se ha puesto en contacto con el "Foreign and Commonwealth Office a través de la Embajada del en el Reino Unido y de la Representación Diplomática británica en Quito", según dicho comunicado.
Ecuador ya ofreció asilo a Assange en 2010
WikiLeaks también informó del movimiento inesperado de Assange a través de sus cuentas de Facebook y Twitter y se espera que en las próximas horas haya un comunicado de la organización, que ha recordado que Quito ya ofreció asilo político a su fundador en noviembre de 2010, poco antes de que se entregara en una comisaría de la capital británica.
Aquel ofrecimiento fue retirado finalmente a través de la embajada ecuatoriana en EEUU por las presiones de Washington, cuya relación con el Gobierno de Correa es casi nula.
En declaraciones a la BBC, Vaughan Smith, la persona que ha prestado su casa en Norfolk a Assange desde que consiguiera la libertad bajo fianza, dijo comprender los motivos del australiano: "Ha habido una campaña organizada en Reino Unido durante los últimos meses para acabar con su reputación y él creía que no sería tratado justamente en Suecia".
(nota reproducida tal cual de Público en línea. Es momento de que se considere a Julian Assange candidato al premio Nóbel de la Paz. )
Assange se personó en la sede diplomática en Londres este martes solicitando protección a través de una carta dirigida al presidente, Rafael Correa, en la que apela a la Declaración Universal de los Derechos Humanos y destaca la posibilidad de que EEUU busque juzgarle por las revelaciones de WikiLeaks.
La noticia fue confirmada desde Quito por el ministro de Exteriores, Ricardo Patiño, quien informó de que el Gobierno está estudiando la petición. Posteriormente, la propia oficina diplomática emitió un comunicado en el que explica que mientras no haya una decisión oficial al respecto, "el señor Assange podrá permanecer en la Embajada bajo protección del Gobierno ecuatoriano".
"La decisión de estudiar la solicitud de asilo del señor Assange no debe ser considerada en ningún caso un acto de interferencia de Ecuador en los procesos judiciales del Reino Unido o de Suecia", añade la nota.
La sentencia del Supremo suponía que la extradición a Suecia, donde se le acusa de dos presuntos delitos de abuso sexual de los que siempre se ha declarado inocente, tenía que hacerse efectiva antes del 28 de junio. Assange, que lleva bajo arresto domiciliario en Inglaterra 18 meses, aún puede presentar un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo para luchar contra su traslado.
La amenaza de ser extraditado a EEUU
Patiño aseguró en una rueda de prensa que "el Gobierno de Ecuador se encuentra evaluando la petición del señor Julian Assange y cualquier decisión que adopte sobre el mismo tendrá en cuenta el respeto a las normas y principios del derecho internacional, así como la tradicional política de Ecuador de velar por los derechos humanos", informa EFE.
Según el ministro, Assange asegura también en esa carta que "la persecución" de la que es "objeto en varios países deriva no solo de sus ideas y sus acciones sino de su trabajo al publicar información que compromete a los poderosos, de publicar la verdad y con ello desenmascarar corrupción y graves abusos a los derechos humanos alrededor del mundo".
"Amenazas de muerte, boicot económico y la posibilidad de ser entregado a las autoridades de EEUU por autoridades británicas, suecas o australianas, hacen que busque en territorio ecuatoriano el asilo político y la protección para permitirme continuar con mi misión en un territorio de paz", concluye la solicitud.
La primera reacción de Washington ha llegado por boca del portavoz del Departamento de Estado, William Ostick, quien en declaraciones a EFE dijo que este "es un asunto entre Suecia, Reino Unido y el propio Ecuador".
Reino Unido ya ha sido informado
Por su parte, el Ministerio de Exteriores ecuatoriano colgó otra nota en su página web, en la que informa de que Assange solicitó a Correa protección ante una “lamentable declaración efectiva de abandono recibida por las autoridades de mi país, Australia, en la cual declaran que no defenderán ni mis garantías mínimas ante ningún gobierno y delegan en la Constitución de un país extranjero que aplica la pena de muerte por el delito de espionaje y traición [...] ignorando la obligación de proteger a su ciudadano, que es perseguido políticamente".
El alegato de Assange añade que "dichas declaraciones hacen imposible mi retorno a mi país de origen y me colocan en un estado de indefensión al ser solicitado para ser interrogado por el Reino de Suecia, lugar donde sus más altos funcionarios me han atacado abiertamente, e investigado por delitos políticos en los Estados Unidos de América, un país donde la pena de muerte por dichas ofensas aún está vigente”.
Ecuador ya se ha puesto en contacto con el "Foreign and Commonwealth Office a través de la Embajada del en el Reino Unido y de la Representación Diplomática británica en Quito", según dicho comunicado.
Ecuador ya ofreció asilo a Assange en 2010
WikiLeaks también informó del movimiento inesperado de Assange a través de sus cuentas de Facebook y Twitter y se espera que en las próximas horas haya un comunicado de la organización, que ha recordado que Quito ya ofreció asilo político a su fundador en noviembre de 2010, poco antes de que se entregara en una comisaría de la capital británica.
Aquel ofrecimiento fue retirado finalmente a través de la embajada ecuatoriana en EEUU por las presiones de Washington, cuya relación con el Gobierno de Correa es casi nula.
En declaraciones a la BBC, Vaughan Smith, la persona que ha prestado su casa en Norfolk a Assange desde que consiguiera la libertad bajo fianza, dijo comprender los motivos del australiano: "Ha habido una campaña organizada en Reino Unido durante los últimos meses para acabar con su reputación y él creía que no sería tratado justamente en Suecia".
(nota reproducida tal cual de Público en línea. Es momento de que se considere a Julian Assange candidato al premio Nóbel de la Paz. )
El Centauro del Norte ya llegó
Torreón, Coah.— El documental en el que se narra la vida del Centauro del Norte, titulado "Los rollos perdidos de Pancho Villa", será proyectado en esta ciudad el jueves 21 de junio, a invitación del gobierno del Estado, la Secretaría de Cultura y el Museo de la Revolución.
La proyección del material tendrá lugar por la noche en la sede del Museo de la Revolución, en esta ciudad, con la introducción y comentarios a cargo de Silvia Castro y Luis Solares.
En el documental se narra en primera persona la búsqueda de una película completa sobre Pancho Villa, a raíz de que Gregorio Rocha -director del documental- encontró 15 rollos con imágenes del mítico revolucionario mexicano en la Biblioteca del Congreso en Washington D.C, filmadas por una productora estadounidense.
La producción cuenta con la participación en el guión, dirección y fotografía de Gregorio Rocha; música de Horacio Uribe y el grupo Laudes; edición de Craig Anderl; testimonios de Kevin Brownlow, Rubén Osorio, Fernando del Moral González, Stephen Bottomore y Paolo Cherchi-Usai.
La función será completada con la proyección del documental "Pancho Villa, la revolución no ha terminado" (2006), de Francesco Taboada Tabone, el cual expone los testimonios de los excombatientes villistas al lado de Pancho Villa, lo mismo que sus ideas de lo que fue este movimiento durante la Revolución Mexicana.
La producción cuenta con la participación de Ernesto Nava, Juana María Villa, Guadalupe Villa, Ana María Zapata, Diego Zapata y veteranos de la legendaria División del Norte.
La filmación cuenta lo ocurrido en la madrugada del 16 de marzo de 1916, cuando las huestes de Pancho Villa entraron a Columbus, Nuevo México, Estados Unidos, en la única invasión que ha sufrido el país vecino del norte.
Ese mismo día, continúa la sinopsis, nació en Durango un niño bautizado con el nombre de Ernesto Villa Ramírez, orgullosamente hijo del general Francisco Villa.
A la muerte del caudillo su madre lo llevó a vivir a Estados Unidos, y le dijo: "Nunca reveles quién es tu padre, porque nos matan". Ochenta y tres años después, el viejo Ernesto regresa a la tierra del general para descubrir que su padre es hoy uno de los guías morales de los campesinos de México y un héroe nacional.
(nota de la agencia Notimex tomada del Diario de Juárez.)
La proyección del material tendrá lugar por la noche en la sede del Museo de la Revolución, en esta ciudad, con la introducción y comentarios a cargo de Silvia Castro y Luis Solares.
En el documental se narra en primera persona la búsqueda de una película completa sobre Pancho Villa, a raíz de que Gregorio Rocha -director del documental- encontró 15 rollos con imágenes del mítico revolucionario mexicano en la Biblioteca del Congreso en Washington D.C, filmadas por una productora estadounidense.
La producción cuenta con la participación en el guión, dirección y fotografía de Gregorio Rocha; música de Horacio Uribe y el grupo Laudes; edición de Craig Anderl; testimonios de Kevin Brownlow, Rubén Osorio, Fernando del Moral González, Stephen Bottomore y Paolo Cherchi-Usai.
La función será completada con la proyección del documental "Pancho Villa, la revolución no ha terminado" (2006), de Francesco Taboada Tabone, el cual expone los testimonios de los excombatientes villistas al lado de Pancho Villa, lo mismo que sus ideas de lo que fue este movimiento durante la Revolución Mexicana.
La producción cuenta con la participación de Ernesto Nava, Juana María Villa, Guadalupe Villa, Ana María Zapata, Diego Zapata y veteranos de la legendaria División del Norte.
La filmación cuenta lo ocurrido en la madrugada del 16 de marzo de 1916, cuando las huestes de Pancho Villa entraron a Columbus, Nuevo México, Estados Unidos, en la única invasión que ha sufrido el país vecino del norte.
Ese mismo día, continúa la sinopsis, nació en Durango un niño bautizado con el nombre de Ernesto Villa Ramírez, orgullosamente hijo del general Francisco Villa.
A la muerte del caudillo su madre lo llevó a vivir a Estados Unidos, y le dijo: "Nunca reveles quién es tu padre, porque nos matan". Ochenta y tres años después, el viejo Ernesto regresa a la tierra del general para descubrir que su padre es hoy uno de los guías morales de los campesinos de México y un héroe nacional.
(nota de la agencia Notimex tomada del Diario de Juárez.)
lunes, 18 de junio de 2012
La Manuela murió en Torreón
cero.
Hace un poco más de tres dècadas (1978) apareció la novela de Luis Zapata, El vampiro de la colonia Roma, obra que trasladaba a la ciudad de México no sólo al pícaro español de Francisco de Quevedo y al anónimo lazarillo de Tormes y la cuerda de hambrientos de aquel entonces, sino que también ubicaba al buscón mexicano en una colonia de clase media informada y semiilustrada. Con esta obra, su autor fijaba un punto de quiebre con la llamada "literatura de la onda", cultivada principalmente por José Agustín como su talento más sobresaliente, pues era la continuación de una escritura y un habla coloquial, sólo que ahora ubicada en el submundo gay y sus respectivos sitios de recreo y ligue. Aunque muy anterior a Zapata ya se conocía la novela de José Revueltas, Los muros de agua (1941) en ésta el narrador es solidario con la pareja gay que purga una condena en las Islas Marías, mientras que la historia de Zapata el narrador, se sobreentiende, se asume homosexual, óptica que deriva, lógicamente, en una novela Queer. Sirva este párrafo introductorio para entrar en seguida en materia a propósito del libro de relatos de Carlos Velázquez (Coahuila, 1978), La marrana negra de la literatura rosa, Sexto piso, 2010, que incluye "La jota de Bergerac".
uno.
Alex no habita un cuerpo equivocado, Alex aborrece su propia nariz que le deforma la visión del mundo, su ideal de belleza y perfección; su deformidad le enturbia la armonía que alcanza cuando se "viste" de Alexia, de otro cuerpo, de otro aroma, de otra vibra. Aunque Alex vaya diariamente al gimnasio y se entrene doce horas continuas, o diferidas en dos sesiones, sabe que al llegar al otro extremo de la piscina o de la vida, ahí, como una maldición, permanecerá ese promontorio monstruoso/asqueroso. Alex es como la bruja del cómic de La Pequeña Lulú, como el jorobado al que delicadamente nos acercamos a tocarle la giba para que nos dé suerte, como el Hombre Elefante con quien, en secreto, nos identificamos por nuestros múltiples talones de Aquiles que escondemos como seres baldados, como apestados sociales, como disidentes de la norma heterosexual. Obstinada, Alexia lleva tres años tratando infructuosamente a acceder a la corona de Miss Gay de Torreón; su nariz de yunque, como en el handicap del hipódromo, la lleva a la derrota y la frustración.
dos.
Al igual que otras ciudades de Coahuila, Torreón es una ciudad joven -poco más de cien años-, aunque ya tiene un paisaje novelístico. Iniciación al relámpago, de Saúl Rosales Carrillo, es un ejemplo reciente de esa geografía urbana de contados edificios diseminados en calles, avenidas y bulevares principales. Por esas polvosas arterias se desplaza Alexia "la vestida", de la calzada Colón a la calle Múzquiz, como parte de una fauna que se despliega al anochecer y hasta la siguiente madrugada, en pos de la carroza de Cenicienta antes que ésta se metamorfosee en un tráiler de condones. La "vestida" de Torreón es hija, acaso nieta, de la Manuela de El lugar sin límites, aquélla se acicala la peluca mientras escucha a Amanda Miguel; y la otra entra en el burdel con "El Relicario" o "Flores Negras". Aunque ambas poseen la facultad de transformar sus andrajos en modelos importados en cuanto se visten, en tanto se transforman en la "otra", así sólo sea para ser presas del escarnio de mayates, chichifos, padrotes y locas.
tres.
Con su cinta experimental El mariachi, el cineasta Robert Rodríguez alcanzó a llamar la atención no sólo de estudiantes jóvenes de cine sino también de Hollywood: había inventado una nueva sintaxis cinematográfica a partir de sus defectos narrativos, de una necesidad de expresión sin recursos económicos suficientes pero con una imaginación harto fresca. En esa obra primeriza había alcanzado una visión nueva, una amalgama de cine y cómic, llave de entrada para contratar a Salma Hayek y Antonio Banderas para una recreación de más aliento. Algo así ha logrado Carlos Velázquez (Coahuila, 1978) con La marrana negra de la literatura rosa,volumen de relatos que incluye la historia "La jota de Bergerac", la otra versión de la criada de San Joaquín o La Vencedora y anexas, colonias de la periferia de Torreón, que sale a talonear noche tras noche en busca del príncipe azul que le financie la operación de la nariz. En el bolso de mano carga una agenda y en la agenda los teléfonos de todos los cirujanos plásticos de La Laguna. Pronto se cruza con Wilmar, beisbolista cubano que encuentra en la "vestida" -la nieta de la Manuela-, su talismán, amuleto o fetiche, como la Caponera en El gallo de oro, de Juan Rulfo.
uno.
Alex no habita un cuerpo equivocado, Alex aborrece su propia nariz que le deforma la visión del mundo, su ideal de belleza y perfección; su deformidad le enturbia la armonía que alcanza cuando se "viste" de Alexia, de otro cuerpo, de otro aroma, de otra vibra. Aunque Alex vaya diariamente al gimnasio y se entrene doce horas continuas, o diferidas en dos sesiones, sabe que al llegar al otro extremo de la piscina o de la vida, ahí, como una maldición, permanecerá ese promontorio monstruoso/asqueroso. Alex es como la bruja del cómic de La Pequeña Lulú, como el jorobado al que delicadamente nos acercamos a tocarle la giba para que nos dé suerte, como el Hombre Elefante con quien, en secreto, nos identificamos por nuestros múltiples talones de Aquiles que escondemos como seres baldados, como apestados sociales, como disidentes de la norma heterosexual. Obstinada, Alexia lleva tres años tratando infructuosamente a acceder a la corona de Miss Gay de Torreón; su nariz de yunque, como en el handicap del hipódromo, la lleva a la derrota y la frustración.
dos.
Al igual que otras ciudades de Coahuila, Torreón es una ciudad joven -poco más de cien años-, aunque ya tiene un paisaje novelístico. Iniciación al relámpago, de Saúl Rosales Carrillo, es un ejemplo reciente de esa geografía urbana de contados edificios diseminados en calles, avenidas y bulevares principales. Por esas polvosas arterias se desplaza Alexia "la vestida", de la calzada Colón a la calle Múzquiz, como parte de una fauna que se despliega al anochecer y hasta la siguiente madrugada, en pos de la carroza de Cenicienta antes que ésta se metamorfosee en un tráiler de condones. La "vestida" de Torreón es hija, acaso nieta, de la Manuela de El lugar sin límites, aquélla se acicala la peluca mientras escucha a Amanda Miguel; y la otra entra en el burdel con "El Relicario" o "Flores Negras". Aunque ambas poseen la facultad de transformar sus andrajos en modelos importados en cuanto se visten, en tanto se transforman en la "otra", así sólo sea para ser presas del escarnio de mayates, chichifos, padrotes y locas.
tres.
Con su cinta experimental El mariachi, el cineasta Robert Rodríguez alcanzó a llamar la atención no sólo de estudiantes jóvenes de cine sino también de Hollywood: había inventado una nueva sintaxis cinematográfica a partir de sus defectos narrativos, de una necesidad de expresión sin recursos económicos suficientes pero con una imaginación harto fresca. En esa obra primeriza había alcanzado una visión nueva, una amalgama de cine y cómic, llave de entrada para contratar a Salma Hayek y Antonio Banderas para una recreación de más aliento. Algo así ha logrado Carlos Velázquez (Coahuila, 1978) con La marrana negra de la literatura rosa,volumen de relatos que incluye la historia "La jota de Bergerac", la otra versión de la criada de San Joaquín o La Vencedora y anexas, colonias de la periferia de Torreón, que sale a talonear noche tras noche en busca del príncipe azul que le financie la operación de la nariz. En el bolso de mano carga una agenda y en la agenda los teléfonos de todos los cirujanos plásticos de La Laguna. Pronto se cruza con Wilmar, beisbolista cubano que encuentra en la "vestida" -la nieta de la Manuela-, su talismán, amuleto o fetiche, como la Caponera en El gallo de oro, de Juan Rulfo.
cuatro.
Alexia, a diferencia de su antepasado literario la Manuela, se venga de su garañón cubano -que también es de ida y vuelta, a diferencia de Pancho Vega-, que, le dijeron las locas intrigosas, le pone los cuernos con la Molko, un efebo gay casi andrógino. Razón suficiente para que la vestida abomine de su modelo femenino Marga López, la "heroína" de Salón México, el esterotipo de la puta pobre que desaira al policía enamorado, Miguel Inclán. Cada generación asume sus arquetipos de belleza femenina; y los de la jota de Bergerac son Lupita D'Alezzio, Gloria Trevi, Alejandra Guzmán -por el contenido "temerario" de sus rolas- y, eventualmente, Paulina Rubio y Eva Longoria. El desenlace de este relato largo o esbozo de novela corta ya se vislumbra desde que Alexia decide mandar al diablo al pelotero cubano, hasta el momento en que le cercena el miembro con la navaja que carga en el bolso. A medias pero la vestida consuma su sueño, no es electa Miss Gay aunque en la Marcha del Orgullo Homosexual ocupa el lugar principal en la vanguardia. Final fársico y de humor negro, consecuente con el tono y la tesitura de cómic que construyó su autor.
cinco.
El relato del que aquí nos ocupamos evidencia, también, el desconocimiento que su autor, Carlos Velázquez, tiene de la sicología del homosexual travesti o "vestida", como él le llama, pues seres como la Manuela y Alexia asumen su rol "femenino" por encima de sus defectos y son capaces de encarnar a una "mujer" sensual y seductora dentro de su representación -son excelentes actores de su propia proyección femenina-. Pero, como lo señala el narrador Rubem Fonseca, al travesti como Alexia no le interesa practicarse la emasculación o ablación -perdería una parte importante de sus "encantos" o un "arma de defensa" frente a los mayates-, ya que como profesional del sexo sabe que "a muchos clientes les gusta también ser sodomizados" (en La novela murió, Cal y Arena, 2008) de donde sale sobrando la aclaración del narrador de Coahuila: "¡Yo no sé por qué no me hice joto! Es uno de los grandes misterios de la naturaleza, crecí entre cantineras, ficheras, vestidas, jotos, prostitutos. Mi hermana fue fichera. Pero me gustan las viejas, es lo mío." (en "La golden age coahuilense", reportaje de Guillermo Sánchez Cervantes, revista Gatopardo.) En este acercamiento inteligente del reportero de investigación con Velázquez y otros escritores relativamente jóvenes, nos enteramos que sólo tiene estudios de Prepa, que tiene un excelente oído para registar los giros del habla popular de Torreón y que su escasa capacidad de análisis de la novela en general, le hace emparentar la obra de Roberto Bolaño con el realismo mágico (¡!), como escribió de su puño y letra en la revista Luvina, número 66, correspondiente a la primavera 2012, "Sada vs. Bolaño."
(Una primera versión de esta nota apareció en la e-review Replicante, correspondiente a mayo 2012.)
domingo, 17 de junio de 2012
Attilio Bertolucci (1911/2000 )
Para B...
LOS pequeños aeroplanos de papel que tú
haces vuelan en el crepúsculo, se pierden
como mariposas nocturnas en el aire
que se oscurece, ya no volverán.
Así nuestros días, pero un abismo
menos dulce que este valle
silente de hojas muertas
y de aguas otoñales los acoge,
donde posan sus cansadas alas
tus frágiles planeadores.
(texto tomado del Atlas de Poesía en línea, versión de Carmelo Vela Saura.)
LOS pequeños aeroplanos de papel que tú
haces vuelan en el crepúsculo, se pierden
como mariposas nocturnas en el aire
que se oscurece, ya no volverán.
Así nuestros días, pero un abismo
menos dulce que este valle
silente de hojas muertas
y de aguas otoñales los acoge,
donde posan sus cansadas alas
tus frágiles planeadores.
(texto tomado del Atlas de Poesía en línea, versión de Carmelo Vela Saura.)
sábado, 16 de junio de 2012
Fassbinder: la vida como artificio
Rainer Werner Fassbinder es un monstruo. No es necesario utilizar el término era , así, en pasado, porque hace 30 años murió un señor llamado Rainer Werner Fassbinder: la obra sólo en apariencia mutante y plural del realizador sigue allí y define al hombre, al nombre. De Katzelmacher (1969) a Berlín Alexanderplatz (1980), de La angustia corroe el alma (“Angst essen Seele auf”,1974) a Lili Marleen (1981), de la trilogía sobre el “Milagro Alemán” a Querelle (1982), podemos decir que hay una mirada única que logró comprender mejor que el Bertolt Brecht en quien quizá pudo inspirarse la idea de que la vida, con sus crueldades y sufrimientos, no es más que una comedia y que sólo el artificio, incluso extremo, puede comunicarnos algún tipo de verdad. Monstruo, pues, porque su obra es extrordinariamente grande –en intensidad y en cantidad–; monstruo por su excepcionalidad –no era un cineasta teoricista como Kluge o Syberberg, o un lírico como Herzog o un cinéfilo entristecido como Wenders–, monstruo, finalmente, porque también es, detrás de la apariencia amable de muchas de sus películas, amable: el espectador puede entrar fácilmente en el juego que proponen muchos de sus filmes, aunque en cualquier momento puede surgir una daga filosa como La tercera generación (“Die dritte Generation”, 1979) o La ruleta china (“Chinesisches Roulette”, 1976) y poner toda certeza en un terrible paréntesis. En suma, una summa : es imposible pensar la obra de Fassbinder sin pensarlo como una continuidad, un laberinto temporal que se llamó Alemania pero es el mundo contemporáneo.
Nació el 31 de mayo de 1945 en una localidad bávara, cuando terminaba la Segunda Guerra Mundial. Pertenece a la generación que tuvo que cargar con el horror apenas sucedido y con la culpa de sus mayores. Hacerse cargo, también, de explicarse qué había sucedido con ese país ahora arrasado y dividido tanto física como espiritualmente. Sobrevivió al divorcio de sus padres, que todas las biografías señalan como duro, y su madre fue quien lo introdujo en el teatro, ella misma intérprete. Es claro que el joven Rainer digirió todo el artefacto teatral: sus películas e incluso sus textos para el escenario prueban que había comprendido temprano la verdad del artificio. Hay siempre en su obra una idea que vuelve una y otra vez: lo monstruoso que se esconde debajo de la normalidad. Podemos pensar que él mismo era una persona dividida, toda vez que se relaciona su trabajo con su homosexualidad en una sociedad no demasiado tolerante. Pero eso sería reducir definitivamente la obra a una clave biográfica poco o nada interesante. Es mucho más rico pensar que esa condición doble le permitía ver de modo mucho más transparente el doblez moral del mundo que lo rodeaba.
Como otros dos grandes autores barrocos de la segunda mitad del siglo XX, los ítalo estadounidenses Francis Ford Coppola y Brian De Palma, Fassbinder aprendió todo lo que debía de la puesta en escena en el teatro más radical posible, en aquello que llegó a llamarse Antiteater, continuación del Action Theater que Kurt Raab había creado también como vanguardia. Es mítico cómo un insistente Fassbinder de 22 años llegó a ver una representación del grupo y decidió que era su hogar, de cómo ascendió a fuerza de determinación hasta convertirse en el núcleo creador de una troupe que hacía de lo espontáneo y la fuerza, de la composición obsesiva de cada escena, valores que contrariaban cualquier idea aceptada. También es mítico que Fassbinder era un déspota al que se le permitía todo, y que su relación más fuerte e inspiradora correspondía a la joven actriz Hannah Schygulla. El cine era, pues, un paso obligado en esta trayectoria. En su primer filme El amor es más frío que la muerte (“Liebe ist kälter als der Tod”, 1969) aparece esa angustia obsesiva por la composición de cada fotograma combinada con una distancia irónica respecto de elementos de los géneros cinematográficos, algo que tiene un aire al Godard de Sin aliento (“A bout de souffle”, 1960) o Alphaville (1965). Pero a diferencia del suizo, Fassbinder cree en sus personajes y trata de entenderlos. Es cierto que hay un dejo teatral, pero sólo en la manera como aparece el artificio: finalmente, tanto este filme como el siguiente, el hermético Katzelmacher , son sobre todo estudios de personajes. Lo que Fassbinder busca a partir de un dominio creciente del aparato cinematográfico es comprender qué pasa dentro de una persona y cómo eso es alterado por las condiciones sociales. En última instancia, como aparece en ese río sólo en apariencia hecho para la televisión llamado Berlín Alexanderplatz , la pregunta sobre el nazismo continúa siendo pertinente: ¿cómo es que eso ha sucedido? ¿Cómo es que el horror ha triunfado? ¿Cómo podemos estar seguros de que tal cosa no puede volver a suceder? Cuando vemos los filmes que dedicó a la posguerra ( Lola –1981–, El matrimonio de María Braun –“Die Ehe der Maria Braun”, 1979) y La ansiedad de Veronika Voss –“Die Sehnsucht der Veronika Voss”, 1982–), queda claro, gracias a una puesta a veces barroca, que detrás de la apariencia de reconstrucción del “milagro alemán” siguen reptando los mismos males que causaron la destrucción de una sociedad y la industrialización de la muerte. Otra vez la duplicidad: los infinitos rincones de cada plano dan al mal muchos lugares donde esconderse.
Era evidente en los 70 que Fassbinder podía hacer grandes películas que inspiraban a otros (basta ver cómo cambió el cine de Scorsese cuando “adoptó” al operador del alemán, Michel Ballhaus) y que no era necesariamente comercial. Sin embargo, ahí estaba el molde del melodrama, de ese cine evidentemente burgués que había aprendido personalmente de Douglas Sirk.
Y basta ver El viaje a la felicidad de mamá Küster (“Mutter Küsters’ Fahrt zum Himmel”, 1975, donde una mujer es utilizada alternativamente por su familia, la prensa y los políticos radicales cuando sólo busca reivindicar la memoria de su marido) para comprender hasta qué punto Fassbinder entiende el melodrama como auténtico cine político. El filme condena a todo el mundo: los patrones abusivos, la familia burguesa, el discurso revolucionario, los medios de comunicación; en suma, toda estructura social y económica que se opone justamente a esa “felicidad” que aguardaba a Mamá Küster en un irónico final feliz que sólo se vio en EE.UU. (en el resto del mundo, el filme termina con un cartel que informa que el personaje muere abatido por la policía). Por cierto, es difícil narrar completa la historia de un filme de Fassbinder porque su narración (melodramática) está llena de meandros que la vuelven compleja sin hacerla incomprensible. Hay en este filme una demostración de que cuando una idea encuentra la forma que le es pertinente, se comunica de modo inmediato con el espectador. No sólo los problemas que el cineasta tuvo con sus productores lo llevaban alternativamente a la televisión o al teatro, sino también la necesidad de que cada cosa que se tenía para decir encontrase su formato más justo. Había comprendido que la historia alemana era el reflejo de la historia del mundo moderno, y que sólo se podía entender si se ponían en primer plano, cuajadas, las máscaras con las que esa sociedad intentó disfrazar sus taras.
Fassbinder era, se repite, despótico, excesivo, un hombre minado por sus elecciones, por las drogas, por las relaciones intensas. Pero esa intensidad parece provenir de una mirada demasiado lúcida sobre el mundo y una búsqueda absoluta de algo que lo trascendiese. Es cierto, Lili Marleen no es su mejor filme y su ironía cómica es cruel. Pero hay algo interesante en esa canción que domaba a la fiera nazi: es lo único trascendente, la única cifra que permite recordar y reconstruir aquel mundo en plena disolución (o, más bien, en pleno suicidio colectivo). Y es cierto, también, que su muerte le impidió acabar una imperfecta, despareja adaptación de Jean Genet, Querelle . Pero ese filme, lleno de excesos sexuales y morales, lleno de color y de furia, simboliza una ruptura con cualquier orden burgués a través de iluminaciones súbitas. Como si al final el artificio se independizara absolutamente en una libertad igualmente absoluta, una libertad tan radical como la muerte.
(nota de Leonardo M. D'Esposito en "revista ñ", Clarín, Buenos Aires. Puede consultarse también: http://los-lavaderos.blogspot.mx/2011/03/fassbinder-von-kant.html)
Nació el 31 de mayo de 1945 en una localidad bávara, cuando terminaba la Segunda Guerra Mundial. Pertenece a la generación que tuvo que cargar con el horror apenas sucedido y con la culpa de sus mayores. Hacerse cargo, también, de explicarse qué había sucedido con ese país ahora arrasado y dividido tanto física como espiritualmente. Sobrevivió al divorcio de sus padres, que todas las biografías señalan como duro, y su madre fue quien lo introdujo en el teatro, ella misma intérprete. Es claro que el joven Rainer digirió todo el artefacto teatral: sus películas e incluso sus textos para el escenario prueban que había comprendido temprano la verdad del artificio. Hay siempre en su obra una idea que vuelve una y otra vez: lo monstruoso que se esconde debajo de la normalidad. Podemos pensar que él mismo era una persona dividida, toda vez que se relaciona su trabajo con su homosexualidad en una sociedad no demasiado tolerante. Pero eso sería reducir definitivamente la obra a una clave biográfica poco o nada interesante. Es mucho más rico pensar que esa condición doble le permitía ver de modo mucho más transparente el doblez moral del mundo que lo rodeaba.
Como otros dos grandes autores barrocos de la segunda mitad del siglo XX, los ítalo estadounidenses Francis Ford Coppola y Brian De Palma, Fassbinder aprendió todo lo que debía de la puesta en escena en el teatro más radical posible, en aquello que llegó a llamarse Antiteater, continuación del Action Theater que Kurt Raab había creado también como vanguardia. Es mítico cómo un insistente Fassbinder de 22 años llegó a ver una representación del grupo y decidió que era su hogar, de cómo ascendió a fuerza de determinación hasta convertirse en el núcleo creador de una troupe que hacía de lo espontáneo y la fuerza, de la composición obsesiva de cada escena, valores que contrariaban cualquier idea aceptada. También es mítico que Fassbinder era un déspota al que se le permitía todo, y que su relación más fuerte e inspiradora correspondía a la joven actriz Hannah Schygulla. El cine era, pues, un paso obligado en esta trayectoria. En su primer filme El amor es más frío que la muerte (“Liebe ist kälter als der Tod”, 1969) aparece esa angustia obsesiva por la composición de cada fotograma combinada con una distancia irónica respecto de elementos de los géneros cinematográficos, algo que tiene un aire al Godard de Sin aliento (“A bout de souffle”, 1960) o Alphaville (1965). Pero a diferencia del suizo, Fassbinder cree en sus personajes y trata de entenderlos. Es cierto que hay un dejo teatral, pero sólo en la manera como aparece el artificio: finalmente, tanto este filme como el siguiente, el hermético Katzelmacher , son sobre todo estudios de personajes. Lo que Fassbinder busca a partir de un dominio creciente del aparato cinematográfico es comprender qué pasa dentro de una persona y cómo eso es alterado por las condiciones sociales. En última instancia, como aparece en ese río sólo en apariencia hecho para la televisión llamado Berlín Alexanderplatz , la pregunta sobre el nazismo continúa siendo pertinente: ¿cómo es que eso ha sucedido? ¿Cómo es que el horror ha triunfado? ¿Cómo podemos estar seguros de que tal cosa no puede volver a suceder? Cuando vemos los filmes que dedicó a la posguerra ( Lola –1981–, El matrimonio de María Braun –“Die Ehe der Maria Braun”, 1979) y La ansiedad de Veronika Voss –“Die Sehnsucht der Veronika Voss”, 1982–), queda claro, gracias a una puesta a veces barroca, que detrás de la apariencia de reconstrucción del “milagro alemán” siguen reptando los mismos males que causaron la destrucción de una sociedad y la industrialización de la muerte. Otra vez la duplicidad: los infinitos rincones de cada plano dan al mal muchos lugares donde esconderse.
Era evidente en los 70 que Fassbinder podía hacer grandes películas que inspiraban a otros (basta ver cómo cambió el cine de Scorsese cuando “adoptó” al operador del alemán, Michel Ballhaus) y que no era necesariamente comercial. Sin embargo, ahí estaba el molde del melodrama, de ese cine evidentemente burgués que había aprendido personalmente de Douglas Sirk.
Y basta ver El viaje a la felicidad de mamá Küster (“Mutter Küsters’ Fahrt zum Himmel”, 1975, donde una mujer es utilizada alternativamente por su familia, la prensa y los políticos radicales cuando sólo busca reivindicar la memoria de su marido) para comprender hasta qué punto Fassbinder entiende el melodrama como auténtico cine político. El filme condena a todo el mundo: los patrones abusivos, la familia burguesa, el discurso revolucionario, los medios de comunicación; en suma, toda estructura social y económica que se opone justamente a esa “felicidad” que aguardaba a Mamá Küster en un irónico final feliz que sólo se vio en EE.UU. (en el resto del mundo, el filme termina con un cartel que informa que el personaje muere abatido por la policía). Por cierto, es difícil narrar completa la historia de un filme de Fassbinder porque su narración (melodramática) está llena de meandros que la vuelven compleja sin hacerla incomprensible. Hay en este filme una demostración de que cuando una idea encuentra la forma que le es pertinente, se comunica de modo inmediato con el espectador. No sólo los problemas que el cineasta tuvo con sus productores lo llevaban alternativamente a la televisión o al teatro, sino también la necesidad de que cada cosa que se tenía para decir encontrase su formato más justo. Había comprendido que la historia alemana era el reflejo de la historia del mundo moderno, y que sólo se podía entender si se ponían en primer plano, cuajadas, las máscaras con las que esa sociedad intentó disfrazar sus taras.
Fassbinder era, se repite, despótico, excesivo, un hombre minado por sus elecciones, por las drogas, por las relaciones intensas. Pero esa intensidad parece provenir de una mirada demasiado lúcida sobre el mundo y una búsqueda absoluta de algo que lo trascendiese. Es cierto, Lili Marleen no es su mejor filme y su ironía cómica es cruel. Pero hay algo interesante en esa canción que domaba a la fiera nazi: es lo único trascendente, la única cifra que permite recordar y reconstruir aquel mundo en plena disolución (o, más bien, en pleno suicidio colectivo). Y es cierto, también, que su muerte le impidió acabar una imperfecta, despareja adaptación de Jean Genet, Querelle . Pero ese filme, lleno de excesos sexuales y morales, lleno de color y de furia, simboliza una ruptura con cualquier orden burgués a través de iluminaciones súbitas. Como si al final el artificio se independizara absolutamente en una libertad igualmente absoluta, una libertad tan radical como la muerte.
(nota de Leonardo M. D'Esposito en "revista ñ", Clarín, Buenos Aires. Puede consultarse también: http://los-lavaderos.blogspot.mx/2011/03/fassbinder-von-kant.html)
viernes, 15 de junio de 2012
César Moro (1903/1956 )
Viaje hacia la noche
Es mi morada suprema, de la que ya no se vuelve
Krishna, en el Bhagavad Gita
Como una madre sostenida por ramas fluviales
De espanto y de luz de origen
Como un caballo esquelético
Radiante de luz crepuscular
Tras el ramaje denso de árboles y árboles de angustia
Lleno de sol el sendero de estrellas marinas
El acopio fulgurante
De datos perdidos en la noche cabal del pasado
Como un jadear eterno si sales a la noche
Al viento calmar pasan los jabalíes
Las hienas hartas de rapiña
Hendido a lo largo el espectáculo muestra
Faces sangrientas de eclipse lunar
El cuerpo en llamarada oscila
Por el tiempo
Sin espacio cambiante
Pues el eterno es el inmóvil
Y todas las piedras arrojadas
Al vendaval a los cuatro puntos cardinales
Vuelven como pájaros señeros
Devorando lagunas de años derruidos
Insondables telarañas de tiempo caído y leñoso
Oquedades herrumbrosas
En el silencio piramidal
Mortecino parpadeante esplendor
Para decirme que aún vivo
Respondiendo por cada poro de mi cuerpo
Al poderío de tu nombre oh poesía
Lima, la horrible, 24 de julio o agosto de 1949
(texto tomado de artepoetica en línea)
Es mi morada suprema, de la que ya no se vuelve
Krishna, en el Bhagavad Gita
Como una madre sostenida por ramas fluviales
De espanto y de luz de origen
Como un caballo esquelético
Radiante de luz crepuscular
Tras el ramaje denso de árboles y árboles de angustia
Lleno de sol el sendero de estrellas marinas
El acopio fulgurante
De datos perdidos en la noche cabal del pasado
Como un jadear eterno si sales a la noche
Al viento calmar pasan los jabalíes
Las hienas hartas de rapiña
Hendido a lo largo el espectáculo muestra
Faces sangrientas de eclipse lunar
El cuerpo en llamarada oscila
Por el tiempo
Sin espacio cambiante
Pues el eterno es el inmóvil
Y todas las piedras arrojadas
Al vendaval a los cuatro puntos cardinales
Vuelven como pájaros señeros
Devorando lagunas de años derruidos
Insondables telarañas de tiempo caído y leñoso
Oquedades herrumbrosas
En el silencio piramidal
Mortecino parpadeante esplendor
Para decirme que aún vivo
Respondiendo por cada poro de mi cuerpo
Al poderío de tu nombre oh poesía
Lima, la horrible, 24 de julio o agosto de 1949
(texto tomado de artepoetica en línea)
jueves, 14 de junio de 2012
Camila Vallejo en México
Camila Vallejo, destacada lider estudiantil chilena en la movilización por una reforma educativa y declarada simpatizante de YoSoy132, charló con la comunidad universitaria de la UAM Xochimilco donde dijo que la política económica está secuestrada en América Latina y que es válido soñar un futuro sin una militancia partidista obligatoria. Foto y nota en Milenio diario en línea. |
FCH: diez mil muertos/ año
Améxica no es sólo un juego de palabras. Mexica es el pueblo azteca de lengua náhuatl que emigró al sur para levantar su gran ciudad de Tenochtitlán -hoy Ciudad de México- y fundar el gran imperio. El movimiento chicano en los EE.UU. resucitó en los años 60 la noción de una tierra madre de los mexicas, Aztlán, basada, como la frontera actual, en la dualidad y en la oposición de complementarios.
“He sido reportero de guerra en muchos campos de batalla”, confiesa el autor en el prólogo, “pero en ninguna parte la violencia ha sido tan extraña ni tan abrumadoramente coercitiva ni ha provocado tanta repugnancia como a lo largo de esta frontera”.
Cuando, hace dos años, vio la luz en inglés el último libro de Ed Vulliamy (1954), veterano corresponsal británico con larga experiencia en los Balcanes y en Irak, el londinense The Times lo incluyó -con Gomorra, de Roberto Saviano, y McMafia, de Misha Glenny- entre los tres mejores trabajos publicados hasta entonces sobre la criminalidad global. “Vulliamy escribe como un moderno Graham Greene”, destacó The New York Review of Books.
La primera edición en castellano corrige las numerosas erratas de traducción de términos españoles al inglés y, en un prefacio de once páginas, actualiza los datos principales de “la primera y prototípica guerra de nuestra sociedad hipermaterialista y agresiva”. “Es la primera verdadera guerra del siglo XXI porque, en última instancia, es una lucha que se libra por nada”, añade el autor, mucho mejor reportero que analista, tras dos viajes a lo largo de toda la frontera en 2008 y 2009, numerosas entrevistas y una minuciosa lectura de la bibliografía más importante sobre el tema, que recoge al final del libro.
“Se libra en una época en que el hipermaterialismo beligerante es una ideología en sí mismo, cuyos representantes principales dirigen sus empresas o bancos con el único credo de la codicia personal”.
Tras un primer capítulo sobre el origen, la estructura y la evolución de la narcomafia mexicana, Vulliamy, apoyado siempre en los mejores periodistas locales, en sacerdotes que viven para contarlo y en un puñado de mujeres valientes, sin apenas fuentes oficiales, recorre los 3.300 kilómetros de la frontera, deteniéndose en las principales ciudades: desde Tijuana en el Pacífico a Matamoros en el Golfo de México, pasando por Altar, Nogales, Agua Prieta, Palomas, Ciudad Juárez, Ojinaga, Nuevo Laredo y Reynosa. Entre Tijuana y Ciudad Juárez, la guerra se libra entre los cárteles de Sinaloa, Tijuana y Beltrán Leyva. En Juárez las pirámides del cártel se han desmoronado, sumiendo a la plaza (jurisdicción) en el caos y en la anarquía. Hasta 2010, de Ciudad Acuña a Nuevo Laredo se mantuvo lo que se conoce como la Pax Mafiosa gracias al férreo control del cártel del Golfo, pero la ruptura con la matriz de su ala militar o Grupo Operativo, los Zetas, hoy aliados con la Ndrangheta de Calabria y muy fuertes en Centroamérica, ha resquebrajado el viejo orden en los puentes entre Viejo y Nuevo Laredo, por los que pasa el 40 por ciento de todo el comercio bilateral. La rivalidad interna y la escisión en el cártel del Golfo, y el conflicto intestino entre el mando del cártel y su brazo ejecutor, han estallado en cruentas luchas en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, “limpieza” de comunidades enteras a punta de pistola y atrocidades espantosas en centros de rehabilitación.
En la primavera del año pasado se encontraron fosas comunes con cerca de 200 cadáveres de personas desaparecidas por todo México. La mayoría habían sido tiroteados, algunos quemados vivos; las mujeres, violadas antes de ser asesinadas. Lo peor es la ignorancia, la impotencia o, lo más grave, la complicidad de las autoridades y de las fuerzas de seguridad, sobre todo de las policías locales, las escasísimas detenciones y condenas, y, ante tanta crueldad e impunidad, que cada vez sean menos los que se atreven a acusar o a denunciar a los asesinos por miedo a represalias.
En un lenguaje crudo, sin ahorrar detalles, el autor revive los momentos más espeluznantes del infierno con escenas ante las que “El Bosco, hasta en sus más vívidamente imaginativos ejemplos de terror piadoso, se habría estremecido”. Con ayuda de supervivientes, nos muestra el calvario de los emigrantes ilegales (pollos) en manos de los coyotes de los cárteles que se han ido apoderando del negocio y presenta el feminicidio que, desde las maquilas de Juárez, se ha ido extendiendo a todo México como un subproducto de las condiciones económicas, de la cultura machista y de la ausencia total de seguridad.
Hasta hoy, advierte Vulliamy, uno de los primeros periodistas que entraron en el campo de concentración serbio de Omarska, en Bosnia, y el primer periodista que testificó, ya en 1996, ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia, “se combatían musulmanes y judíos, comunistas y fascistas, serbios y croatas, tutsis y hutus [...] por una causa, una fe [...], por descabellada que fuera”. Sin una causa desencadenante concreta, “los mexicanos se están mutilando, torturando y matando unos a otros aparentemente por dinero y por las rutas del contrabando de drogas que lo generan”, pero “la mayor parte de la violencia brutal [...] se debe a la lucha por los pequeños beneficios del mercado doméstico y el trapicheo callejero”. Sin que la izquierda ni la derecha mexicanas demuestren capacidad alguna de resistencia, la narcoguerra se libra también en la red, en YouTube y en los teléfonos móviles, que los cárteles utilizan para amenazar a rivales y funcionarios, y abrir perversas páginas, muy visitadas, en las que exhiben sus barbaridades.
Las bandas criminales dedicadas al narcotráfico, para Vulliamy, no son pastiches de corporaciones globales ni bastardos errantes de la economía global, sino pioneros que señalan, con su lógica comercial y su modus operandi, el paso siguiente de la nueva economía planetaria. Para el autor, la carnicería de México (unos 10.000 muertos cada año desde que, en diciembre de 2006, el presidente Felipe Calderón declaró la guerra a los cárteles de la droga) representa la era del gobierno global de la banca multinacional que, según Antonio María Costa, ex jefe de la Oficina de Narcóticos y el Orden Público de la ONU, se ha mantenido a flote durante años mediante el blanqueo de los beneficios de la droga y del crimen. Acusación tan grave merecería algo más que un posfacio en un texto de 400 páginas. Aunque el testimonio de Martin Woods, ex jefe del departamento contra el blanqueo de dinero de Wachovia, banco adquirido por Wells Fargo en el crash de 2008, parece solvente y las cantidades transferidas desde las “casas de cambio”mexicanas a cuentas en dólares de Wachovia en los EE.UU. (378.400 millones de dólares, un tercio del PIB mexicano) son escandalosas, el autor pierde credibilidad al generalizar sin pruebas suficientes.
Si el Partido Revolucionario Independiente (PRI), como anuncian las encuestas, recupera la presidencia en julio, Vulliamy, refugiado desde hace tiempo en una casa de falso adobe en las afueras de Tucson, Arizona, a 115 kilómetros de la frontera, prevé una moderación del conflicto y una versión mutada de la Pax Mafiosa que funcionó hasta la derrota del PRI en 2001, pero el impacto de esta guerra sobre México será más profundo y a más largo plazo. Como repite David Rieff, a pesar de todo “México es un Estado herido, pero no muerto ni fallido” y es probable que aún no hayamos visto todo el poder de sus militares. “Cuando lo veamos”, advierte, “si llega el caso, el paisaje cambiará radicalmente.
(reseña de Felipe Sahagún en El Cultural, El Mundo en línea.)
“He sido reportero de guerra en muchos campos de batalla”, confiesa el autor en el prólogo, “pero en ninguna parte la violencia ha sido tan extraña ni tan abrumadoramente coercitiva ni ha provocado tanta repugnancia como a lo largo de esta frontera”.
Cuando, hace dos años, vio la luz en inglés el último libro de Ed Vulliamy (1954), veterano corresponsal británico con larga experiencia en los Balcanes y en Irak, el londinense The Times lo incluyó -con Gomorra, de Roberto Saviano, y McMafia, de Misha Glenny- entre los tres mejores trabajos publicados hasta entonces sobre la criminalidad global. “Vulliamy escribe como un moderno Graham Greene”, destacó The New York Review of Books.
La primera edición en castellano corrige las numerosas erratas de traducción de términos españoles al inglés y, en un prefacio de once páginas, actualiza los datos principales de “la primera y prototípica guerra de nuestra sociedad hipermaterialista y agresiva”. “Es la primera verdadera guerra del siglo XXI porque, en última instancia, es una lucha que se libra por nada”, añade el autor, mucho mejor reportero que analista, tras dos viajes a lo largo de toda la frontera en 2008 y 2009, numerosas entrevistas y una minuciosa lectura de la bibliografía más importante sobre el tema, que recoge al final del libro.
“Se libra en una época en que el hipermaterialismo beligerante es una ideología en sí mismo, cuyos representantes principales dirigen sus empresas o bancos con el único credo de la codicia personal”.
Tras un primer capítulo sobre el origen, la estructura y la evolución de la narcomafia mexicana, Vulliamy, apoyado siempre en los mejores periodistas locales, en sacerdotes que viven para contarlo y en un puñado de mujeres valientes, sin apenas fuentes oficiales, recorre los 3.300 kilómetros de la frontera, deteniéndose en las principales ciudades: desde Tijuana en el Pacífico a Matamoros en el Golfo de México, pasando por Altar, Nogales, Agua Prieta, Palomas, Ciudad Juárez, Ojinaga, Nuevo Laredo y Reynosa. Entre Tijuana y Ciudad Juárez, la guerra se libra entre los cárteles de Sinaloa, Tijuana y Beltrán Leyva. En Juárez las pirámides del cártel se han desmoronado, sumiendo a la plaza (jurisdicción) en el caos y en la anarquía. Hasta 2010, de Ciudad Acuña a Nuevo Laredo se mantuvo lo que se conoce como la Pax Mafiosa gracias al férreo control del cártel del Golfo, pero la ruptura con la matriz de su ala militar o Grupo Operativo, los Zetas, hoy aliados con la Ndrangheta de Calabria y muy fuertes en Centroamérica, ha resquebrajado el viejo orden en los puentes entre Viejo y Nuevo Laredo, por los que pasa el 40 por ciento de todo el comercio bilateral. La rivalidad interna y la escisión en el cártel del Golfo, y el conflicto intestino entre el mando del cártel y su brazo ejecutor, han estallado en cruentas luchas en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, “limpieza” de comunidades enteras a punta de pistola y atrocidades espantosas en centros de rehabilitación.
En la primavera del año pasado se encontraron fosas comunes con cerca de 200 cadáveres de personas desaparecidas por todo México. La mayoría habían sido tiroteados, algunos quemados vivos; las mujeres, violadas antes de ser asesinadas. Lo peor es la ignorancia, la impotencia o, lo más grave, la complicidad de las autoridades y de las fuerzas de seguridad, sobre todo de las policías locales, las escasísimas detenciones y condenas, y, ante tanta crueldad e impunidad, que cada vez sean menos los que se atreven a acusar o a denunciar a los asesinos por miedo a represalias.
En un lenguaje crudo, sin ahorrar detalles, el autor revive los momentos más espeluznantes del infierno con escenas ante las que “El Bosco, hasta en sus más vívidamente imaginativos ejemplos de terror piadoso, se habría estremecido”. Con ayuda de supervivientes, nos muestra el calvario de los emigrantes ilegales (pollos) en manos de los coyotes de los cárteles que se han ido apoderando del negocio y presenta el feminicidio que, desde las maquilas de Juárez, se ha ido extendiendo a todo México como un subproducto de las condiciones económicas, de la cultura machista y de la ausencia total de seguridad.
Hasta hoy, advierte Vulliamy, uno de los primeros periodistas que entraron en el campo de concentración serbio de Omarska, en Bosnia, y el primer periodista que testificó, ya en 1996, ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia, “se combatían musulmanes y judíos, comunistas y fascistas, serbios y croatas, tutsis y hutus [...] por una causa, una fe [...], por descabellada que fuera”. Sin una causa desencadenante concreta, “los mexicanos se están mutilando, torturando y matando unos a otros aparentemente por dinero y por las rutas del contrabando de drogas que lo generan”, pero “la mayor parte de la violencia brutal [...] se debe a la lucha por los pequeños beneficios del mercado doméstico y el trapicheo callejero”. Sin que la izquierda ni la derecha mexicanas demuestren capacidad alguna de resistencia, la narcoguerra se libra también en la red, en YouTube y en los teléfonos móviles, que los cárteles utilizan para amenazar a rivales y funcionarios, y abrir perversas páginas, muy visitadas, en las que exhiben sus barbaridades.
Las bandas criminales dedicadas al narcotráfico, para Vulliamy, no son pastiches de corporaciones globales ni bastardos errantes de la economía global, sino pioneros que señalan, con su lógica comercial y su modus operandi, el paso siguiente de la nueva economía planetaria. Para el autor, la carnicería de México (unos 10.000 muertos cada año desde que, en diciembre de 2006, el presidente Felipe Calderón declaró la guerra a los cárteles de la droga) representa la era del gobierno global de la banca multinacional que, según Antonio María Costa, ex jefe de la Oficina de Narcóticos y el Orden Público de la ONU, se ha mantenido a flote durante años mediante el blanqueo de los beneficios de la droga y del crimen. Acusación tan grave merecería algo más que un posfacio en un texto de 400 páginas. Aunque el testimonio de Martin Woods, ex jefe del departamento contra el blanqueo de dinero de Wachovia, banco adquirido por Wells Fargo en el crash de 2008, parece solvente y las cantidades transferidas desde las “casas de cambio”mexicanas a cuentas en dólares de Wachovia en los EE.UU. (378.400 millones de dólares, un tercio del PIB mexicano) son escandalosas, el autor pierde credibilidad al generalizar sin pruebas suficientes.
Si el Partido Revolucionario Independiente (PRI), como anuncian las encuestas, recupera la presidencia en julio, Vulliamy, refugiado desde hace tiempo en una casa de falso adobe en las afueras de Tucson, Arizona, a 115 kilómetros de la frontera, prevé una moderación del conflicto y una versión mutada de la Pax Mafiosa que funcionó hasta la derrota del PRI en 2001, pero el impacto de esta guerra sobre México será más profundo y a más largo plazo. Como repite David Rieff, a pesar de todo “México es un Estado herido, pero no muerto ni fallido” y es probable que aún no hayamos visto todo el poder de sus militares. “Cuando lo veamos”, advierte, “si llega el caso, el paisaje cambiará radicalmente.
(reseña de Felipe Sahagún en El Cultural, El Mundo en línea.)
miércoles, 13 de junio de 2012
Israel rompe el armario
Jerusalén.- La foto de dos militares gays ha sacudido las portadas de los diarios israelíes pues fue el mismo Ejército que colgó la imagen en Feisbuk para promocionar la permisividad durante el mes de los derechos de los homosexuales en el mundo. Foto y nota en El Mundo en línea. |
martes, 12 de junio de 2012
Sao Paulo Queer
El Orgullo Gay de Sao Paulo, considerada como una de las mayores manifestaciones homosexuales del mundo, reunió hoy a miles de personas de diferentes países que marcharon contra la homofobia y la discriminación. La 16ª edición de la marcha tuvo como lema "La homofobia tiene cura: Educación y criminalización", en un nueva llamada de la comunidad homosexual para protestar por los ataques que sufren constantemente sus integrantes.
Los ríos humanos desembocaron en la céntrica Avenida Paulista, el corazón financiero de Brasil y el punto más alto de la ciudad, que volvió a ser este año el epicentro de los movimientos que luchan por los derechos de los homosexuales. Según los organizadores, cerca de tres millones de personas desfilaron detrás de 14 tríos eléctricos, como se denominan los gigantescos camiones de sonido, animados por artistas y adornados de manera multicolor. La Alcaldía de Sao Paulo repartió 700.000 preservativos entre los participantes, en una campaña de prevención de enfermedades de transmisión sexual entre la población homosexual.
A la bandera arco iris, que simboliza el movimiento homosexual en el mundo, se unieron las de otros países que tuvieron delegaciones en la marcha. Personajes como la presidenta brasileña, Dilma Rousseff; el terrorista Osama Bin Laden, los súper héroes Batman y Superman, entre otros, fueron caracterizados en los disfraces de los participantes. La programación paralela al Orgullo Gay se extiende durante todo el mes e incluye la Feria Cultural LGBT, celebrada el último jueves; el Día Gay, la Caminata de las Lesbianas, conciertos, lanzamientos de libros y exposiciones con el tema homosexual, piezas de teatro y un torneo de voleibol de Drag queens.
La organización programó también un ciclo de debates sobre las políticas homosexuales del Gobierno, encabezado por el periodista y diputado Jean Wyllys, ganador en 2005 de la edición brasileña del programa de telerrealidad Gran Hermano.Wyllys y otros congresistas brasileños trabajan para lograr la aprobación del matrimonio civil igualitario, iniciativa para la cual contarán con el apoyo de artistas como Caetano Veloso, Chico Buarque y Carlinhos Brown. En Brasil, la unión homosexual estable es reconocida por la Justicia para diferentes efectos civiles y puede ser registrada en una notaría, pero el casamiento "es la única cosa que garantiza la plenitud de los derechos", apuntó recientemente Wyllys.
(nota reproducida de Público en línea.)
Los ríos humanos desembocaron en la céntrica Avenida Paulista, el corazón financiero de Brasil y el punto más alto de la ciudad, que volvió a ser este año el epicentro de los movimientos que luchan por los derechos de los homosexuales. Según los organizadores, cerca de tres millones de personas desfilaron detrás de 14 tríos eléctricos, como se denominan los gigantescos camiones de sonido, animados por artistas y adornados de manera multicolor. La Alcaldía de Sao Paulo repartió 700.000 preservativos entre los participantes, en una campaña de prevención de enfermedades de transmisión sexual entre la población homosexual.
A la bandera arco iris, que simboliza el movimiento homosexual en el mundo, se unieron las de otros países que tuvieron delegaciones en la marcha. Personajes como la presidenta brasileña, Dilma Rousseff; el terrorista Osama Bin Laden, los súper héroes Batman y Superman, entre otros, fueron caracterizados en los disfraces de los participantes. La programación paralela al Orgullo Gay se extiende durante todo el mes e incluye la Feria Cultural LGBT, celebrada el último jueves; el Día Gay, la Caminata de las Lesbianas, conciertos, lanzamientos de libros y exposiciones con el tema homosexual, piezas de teatro y un torneo de voleibol de Drag queens.
La organización programó también un ciclo de debates sobre las políticas homosexuales del Gobierno, encabezado por el periodista y diputado Jean Wyllys, ganador en 2005 de la edición brasileña del programa de telerrealidad Gran Hermano.Wyllys y otros congresistas brasileños trabajan para lograr la aprobación del matrimonio civil igualitario, iniciativa para la cual contarán con el apoyo de artistas como Caetano Veloso, Chico Buarque y Carlinhos Brown. En Brasil, la unión homosexual estable es reconocida por la Justicia para diferentes efectos civiles y puede ser registrada en una notaría, pero el casamiento "es la única cosa que garantiza la plenitud de los derechos", apuntó recientemente Wyllys.
(nota reproducida de Público en línea.)
lunes, 11 de junio de 2012
Héctor García: una pasión terminal
En la imagen se ve un niño. Va descalzo. La ropa maltrecha. Un sombrero que se intuye blanco. Hay dos carros a los lados. Dos carros enfrentados, como queriendo aprisionarlo. En una esquina se lee USA. Es posible que las letras hagan parte de otra palabra, pero la imagen sólo deja ver esto. Pocos elementos, que a la vez dicen todo. Remata el título: “Entre el progreso y el desarrollo”.
Héctor García asumió la fotografía como un oficio social. Denunciante, pero no panfletario. Consciente, pero no aleccionador. Bello. Sutil. Concreto. En más de 60 años de trabajo produjo más de un millón de diapositivas que hoy son tratadas como un tesoro nacional en México, pues el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) se dio a la tarea de digitalizar la obra de este gran maestro que retrató la profunda inequidad de una sociedad que progresa por encima de su propia gente, una historia harto conocida en el resto del continente, por lo demás.
García nació en 1923 y al poco tiempo quedó huérfano. Parte de su educación vino de la calle, un lugar que aparecería constantemente en sus fotografías como personaje de sus retratos, fondo de la injusticia, testigo del desarrollo. Fue un inmigrante fallido y deportado. Al regresar obligado de Estados Unidos comenzó a trabajar para varias publicaciones, no como fotógrafo, sino más como observador del oficio, un alumno de la técnica, pues su estética, su ojo, fue un asunto que saldó con la ciudad misma: el hombre de la calle.
En un principio no le era permitido sacar fotografías. Para finales de los años cincuenta, García trabajaba como fotorreportero para el periódico Excelsior. Por esos días, Demetrio Vallejo era ya una prominente figura de la izquierda mexicana quien, desde el sindicato de trabajadores de los ferrocarriles, levantaba polvo con una serie de huelgas por las cuales fue encarcelado. García tomó las fotos de su aprisionamiento, imágenes que Excelsior no quiso publicar.
En unos pocos años, el fotorreportero pasó de no poder publicar por falta de experiencia a no poder publicar por una censura disfrazada de desdén editorial.
La voluntad lo es todo. Con el apoyo del periodista Horacio Quiñones, quien puso el capital y convenció a García, publicaron la revista ‘Ojo!, una revista que ve’, en la que aparecía el reportaje gráfico de las huelgas de los ferrocarriles. Se imprimieron cinco mil ejemplares y otro amigo se encargó de distribuirla. Toda la edición se fue en un día, incluso a precios más altos que el de la portada.
Con este éxito, García pensó en imprimir más ejemplares, hasta que Quiñones le advirtió que la Policía había pasado por el taller de impresión y se había llevado las placas. El reportero gráfico debió esconderse por un tiempo. En 1959 ganó el premio nacional de periodismo de México por este trabajo.
La reportería gráfica es un asunto que suele incomodar al poder, cuyo reflejo sale impoluto de la cámara, libre de zalamerías y artificios para ganar elecciones. La realidad de García era cargada de tonos oscuros, con un marcado contraste entre la sombra y la luz, como si México entero sólo existiera en esa franja dramática de la imagen, la tensión entre el olvido y la sobreexposición.
El legado de García es la crónica social que dejó de un país que emergió de una revolución popular para entrar en conflicto luego con el desarrollo y el mercado. Su mirada es, más que una lección, un estudio de lo urbano, un ejercicio de observación de la vida al interior de la colmena de abejas. Su último deseo era ser enterrado de pie en un panteón de Xochimilco, al sur de Ciudad de México, con una ventanita en el ataúd "para que pudiera seguir viendo la ciudad". La fotografía como pasión terminal.
(La última vez que tuviste a la mano la mano del fotógrafo Héctor García, aquí en Zacatecas, fue en la premiación de un concurso de fotografía, en que fue jurado y estaba presente para entregar los premios. Esperaste a que se desocupara para decirle que eres amigo del pintor xalapeño Pepe Maya, amigo de correrías suyo, pero nunca lo "soltó" el colega Juan Antonio Sánchez (a) El Cuajanais, que falleció mucho antes que el autor de la foto de David Alfaro Siqueiros en Lecumberri. Nota de Santiago La Rotta en el diario El Espectador, de Colombia, on line.)
Héctor García asumió la fotografía como un oficio social. Denunciante, pero no panfletario. Consciente, pero no aleccionador. Bello. Sutil. Concreto. En más de 60 años de trabajo produjo más de un millón de diapositivas que hoy son tratadas como un tesoro nacional en México, pues el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) se dio a la tarea de digitalizar la obra de este gran maestro que retrató la profunda inequidad de una sociedad que progresa por encima de su propia gente, una historia harto conocida en el resto del continente, por lo demás.
García nació en 1923 y al poco tiempo quedó huérfano. Parte de su educación vino de la calle, un lugar que aparecería constantemente en sus fotografías como personaje de sus retratos, fondo de la injusticia, testigo del desarrollo. Fue un inmigrante fallido y deportado. Al regresar obligado de Estados Unidos comenzó a trabajar para varias publicaciones, no como fotógrafo, sino más como observador del oficio, un alumno de la técnica, pues su estética, su ojo, fue un asunto que saldó con la ciudad misma: el hombre de la calle.
En un principio no le era permitido sacar fotografías. Para finales de los años cincuenta, García trabajaba como fotorreportero para el periódico Excelsior. Por esos días, Demetrio Vallejo era ya una prominente figura de la izquierda mexicana quien, desde el sindicato de trabajadores de los ferrocarriles, levantaba polvo con una serie de huelgas por las cuales fue encarcelado. García tomó las fotos de su aprisionamiento, imágenes que Excelsior no quiso publicar.
En unos pocos años, el fotorreportero pasó de no poder publicar por falta de experiencia a no poder publicar por una censura disfrazada de desdén editorial.
La voluntad lo es todo. Con el apoyo del periodista Horacio Quiñones, quien puso el capital y convenció a García, publicaron la revista ‘Ojo!, una revista que ve’, en la que aparecía el reportaje gráfico de las huelgas de los ferrocarriles. Se imprimieron cinco mil ejemplares y otro amigo se encargó de distribuirla. Toda la edición se fue en un día, incluso a precios más altos que el de la portada.
Con este éxito, García pensó en imprimir más ejemplares, hasta que Quiñones le advirtió que la Policía había pasado por el taller de impresión y se había llevado las placas. El reportero gráfico debió esconderse por un tiempo. En 1959 ganó el premio nacional de periodismo de México por este trabajo.
La reportería gráfica es un asunto que suele incomodar al poder, cuyo reflejo sale impoluto de la cámara, libre de zalamerías y artificios para ganar elecciones. La realidad de García era cargada de tonos oscuros, con un marcado contraste entre la sombra y la luz, como si México entero sólo existiera en esa franja dramática de la imagen, la tensión entre el olvido y la sobreexposición.
El legado de García es la crónica social que dejó de un país que emergió de una revolución popular para entrar en conflicto luego con el desarrollo y el mercado. Su mirada es, más que una lección, un estudio de lo urbano, un ejercicio de observación de la vida al interior de la colmena de abejas. Su último deseo era ser enterrado de pie en un panteón de Xochimilco, al sur de Ciudad de México, con una ventanita en el ataúd "para que pudiera seguir viendo la ciudad". La fotografía como pasión terminal.
(La última vez que tuviste a la mano la mano del fotógrafo Héctor García, aquí en Zacatecas, fue en la premiación de un concurso de fotografía, en que fue jurado y estaba presente para entregar los premios. Esperaste a que se desocupara para decirle que eres amigo del pintor xalapeño Pepe Maya, amigo de correrías suyo, pero nunca lo "soltó" el colega Juan Antonio Sánchez (a) El Cuajanais, que falleció mucho antes que el autor de la foto de David Alfaro Siqueiros en Lecumberri. Nota de Santiago La Rotta en el diario El Espectador, de Colombia, on line.)
domingo, 10 de junio de 2012
Sofía Castañón (1983 )
L'astronome qui regarde en bas
Lavas las manos
en lo profundo del cosmos
mientras me miras
con sonrisa dulce
y dices que me entiendes.
(text tomado del sitio de la autora.)
Lavas las manos
en lo profundo del cosmos
mientras me miras
con sonrisa dulce
y dices que me entiendes.
(text tomado del sitio de la autora.)
sábado, 9 de junio de 2012
Gabo, perdido en Macondo
Hace dos días Plinio Apuleyo Mendoza le confesó a Édgar Artunduaga que Gabriel García Márquez ya no podía reconocer a una persona por su voz. Me temo que la situación de Gabo puede ser, de hecho, peor: lean esta frase que escribió en El Tiempo en septiembre del año pasado, a propósito de los tiempos de la revista Alternativa, Enrique Santos Calderón sobre su gran amigo: “Sin temor a equivocarme -que me corrija la ‘Gaba’, que estuvo siempre al pie del cañón- puedo asegurar que esos años de alternativa fueron la etapa más politizada de la vida de García Márquez”. Tristísima la frase. O por lo menos para mí. Es una confirmación de lo que era un secreto a voces pero que, en el fondo de mi alma, esperaba que fuera una habladuría más. Al parecer no lo es: la frase, inconsciente o no, nos ratifica la noticia, no sólo de que Gabo ya no reconoce a una persona por su voz, sino de que Gabo ya no es Gabo; de que probablemente de lo único que se esté acordando ahora sea de una infancia remota que por millonésima vez es su propia imagen asándose de calor en la arena de las calles de Aracataca.
No de otro modo se explica el tratamiento de difunto que le da Santos Calderón: ¿por qué habría de corregirlo la esposa y no el propio Gabo que, por supuesto, estuvo un poco más que al pie del cañón y quien todavía vive? En general toda la crónica es así –o ya la veo así después de la frase referida-, en ese tono elegíaco, como si nuestro gran patriarca de Macondo ya no fuera de este mundo, como si su merecido otoño ya hubiese dado paso a un irreversible invierno mental, vergonzante, ya no para él, que ni siquiera lo sabría, sino para sus familiares y amigos quienes, a pesar de las jugadas del inconsciente, quisieran preservar su lejana imagen apabullante de hombre sabio; quienes quisieran que se le respetaran estos tiempos difíciles en que la literatura y la clarividencia de la vida son ahora una materia intangible para un hombre que siempre cerró su vida privada al mundo con tres aldabas, tres cerrojos, tres pestillos.
Ya Gerald Martin, su biógrafo oficial, había dado unas primeras noticias; dadas así, con cautela, como cuando le informan a alguien que un pariente muy cercano y muy querido se va a morir pronto. Esto escribió sobre Gabo en Una Vida, la biografía que sobre él hizo: “Con los apuntes adecuados era capaz de recordar la mayoría de las cosas del pasado distante –aunque no siempre los títulos de sus novelas- y entablar una conversación razonablemente normal, incluso divertida”. Terrible situación para alguien que siempre se tuvo a sí mismo como un profesional de la memoria; para alguien que en los pantanos de la vejez le debía quedar radiante, como un trofeo, el recuerdo de los numerosos escollos que tuvo que sortear durante una infancia y una juventud en las que se disputó la vida a brazo partido con la pobreza; para alguien que las bolas de candela de los extremismos políticos y los eclipses aciagos, producto del reguero de adioses finales de sus amigos del alma, lo habían curtido contra los recursos de lástima de las troneras de la memoria.
Tranquiliza, al menos, saber que no sabe que la vida sigue, aún con él a espaldas de su propio poder, de ese poder que, por otro lado, siempre persiguió: en Clinton de Estados Unidos, en Fidel de Cuba, en Torrijos de Panamá, en Mitterrand de Francia, en Felipe González de España, en López de Colombia (y en casi todos los presidentes de Colombia de los últimos 40 años, con la infame excepción de Turbay); a espaldas de sus amores furtivos y de sus amores inverosímiles de perdición; a espaldas de su fortuna personal, ahora incontable y estéril, refundida por los peores acechos de unos olvidos que lo deben tener tantaleando en las nieblas ilusorias de una vida que ya no es la suya.
Repito: es triste. Y, a pesar de que su deslumbrante edad lo dispone, me es difícil imaginarme a mi maestro cautivo de sus propios delirios en el marasmo senil de una hamaca, desprendido sin dios de una realidad con la que no necesita reconciliarse, qué vaina, y sin embargo, y aunque él se quede sin saberlo para siempre, prefiero pensarlo así, aún vivo, para poder darle, en las últimas hojas heladas de su otoño, las gracias, maestro amado, gracias por los clamores de las muchedumbres frenéticas que con la noticia de tu Premio Nobel se echaron a la calle cantando himnos de júbilo, gracias porque en la ristra de hojas amarillas de tu otoño arrastras las ilusiones de todo un pueblo que supiste descifrar con artificios de alquimista, y al que le diste instantes inasibles de felicidad, gracias por los cohetes de gozo y las campanas de gloria que a pesar de tu partida seguirán en tus libros, en tus palabras, en tu recuerdo, y nos seguirán anunciado por siempre jamás que el tiempo incontable de la eternidad para ti nunca terminará.
(Tienes un amigo que le ha tocado cuidar a su madre de un ramo precioso de achaques que vienen con la edad, entre otras virtudes la señora se sienta a platicar de la calle -ahora llamada Ramón López Velarde- en que vivió de niña con sus padres, pero trasladada a aquel pasado, como en flash back, calle que era un arroyo -como los versos del poeta jerezano, aunque a veces cargados de fango y alimañas-; le ha tocado a él comprarle y cambiarle los pañales cuando es necesario, checar la posición en la cama para que no se llague; llevarla y traerla cada tercer día del lavado intestinal y comprarle los sustitutos vitamínicos cuando no quiere comer a sus horas; etcétera. Mi amigo dice que no quiere llegar a la edad de su madre para no "despertar" lástima. Nota de Samuel Rosales en el blog "kien&ke", hecho en Colombia.)
No de otro modo se explica el tratamiento de difunto que le da Santos Calderón: ¿por qué habría de corregirlo la esposa y no el propio Gabo que, por supuesto, estuvo un poco más que al pie del cañón y quien todavía vive? En general toda la crónica es así –o ya la veo así después de la frase referida-, en ese tono elegíaco, como si nuestro gran patriarca de Macondo ya no fuera de este mundo, como si su merecido otoño ya hubiese dado paso a un irreversible invierno mental, vergonzante, ya no para él, que ni siquiera lo sabría, sino para sus familiares y amigos quienes, a pesar de las jugadas del inconsciente, quisieran preservar su lejana imagen apabullante de hombre sabio; quienes quisieran que se le respetaran estos tiempos difíciles en que la literatura y la clarividencia de la vida son ahora una materia intangible para un hombre que siempre cerró su vida privada al mundo con tres aldabas, tres cerrojos, tres pestillos.
Ya Gerald Martin, su biógrafo oficial, había dado unas primeras noticias; dadas así, con cautela, como cuando le informan a alguien que un pariente muy cercano y muy querido se va a morir pronto. Esto escribió sobre Gabo en Una Vida, la biografía que sobre él hizo: “Con los apuntes adecuados era capaz de recordar la mayoría de las cosas del pasado distante –aunque no siempre los títulos de sus novelas- y entablar una conversación razonablemente normal, incluso divertida”. Terrible situación para alguien que siempre se tuvo a sí mismo como un profesional de la memoria; para alguien que en los pantanos de la vejez le debía quedar radiante, como un trofeo, el recuerdo de los numerosos escollos que tuvo que sortear durante una infancia y una juventud en las que se disputó la vida a brazo partido con la pobreza; para alguien que las bolas de candela de los extremismos políticos y los eclipses aciagos, producto del reguero de adioses finales de sus amigos del alma, lo habían curtido contra los recursos de lástima de las troneras de la memoria.
Tranquiliza, al menos, saber que no sabe que la vida sigue, aún con él a espaldas de su propio poder, de ese poder que, por otro lado, siempre persiguió: en Clinton de Estados Unidos, en Fidel de Cuba, en Torrijos de Panamá, en Mitterrand de Francia, en Felipe González de España, en López de Colombia (y en casi todos los presidentes de Colombia de los últimos 40 años, con la infame excepción de Turbay); a espaldas de sus amores furtivos y de sus amores inverosímiles de perdición; a espaldas de su fortuna personal, ahora incontable y estéril, refundida por los peores acechos de unos olvidos que lo deben tener tantaleando en las nieblas ilusorias de una vida que ya no es la suya.
Repito: es triste. Y, a pesar de que su deslumbrante edad lo dispone, me es difícil imaginarme a mi maestro cautivo de sus propios delirios en el marasmo senil de una hamaca, desprendido sin dios de una realidad con la que no necesita reconciliarse, qué vaina, y sin embargo, y aunque él se quede sin saberlo para siempre, prefiero pensarlo así, aún vivo, para poder darle, en las últimas hojas heladas de su otoño, las gracias, maestro amado, gracias por los clamores de las muchedumbres frenéticas que con la noticia de tu Premio Nobel se echaron a la calle cantando himnos de júbilo, gracias porque en la ristra de hojas amarillas de tu otoño arrastras las ilusiones de todo un pueblo que supiste descifrar con artificios de alquimista, y al que le diste instantes inasibles de felicidad, gracias por los cohetes de gozo y las campanas de gloria que a pesar de tu partida seguirán en tus libros, en tus palabras, en tu recuerdo, y nos seguirán anunciado por siempre jamás que el tiempo incontable de la eternidad para ti nunca terminará.
(Tienes un amigo que le ha tocado cuidar a su madre de un ramo precioso de achaques que vienen con la edad, entre otras virtudes la señora se sienta a platicar de la calle -ahora llamada Ramón López Velarde- en que vivió de niña con sus padres, pero trasladada a aquel pasado, como en flash back, calle que era un arroyo -como los versos del poeta jerezano, aunque a veces cargados de fango y alimañas-; le ha tocado a él comprarle y cambiarle los pañales cuando es necesario, checar la posición en la cama para que no se llague; llevarla y traerla cada tercer día del lavado intestinal y comprarle los sustitutos vitamínicos cuando no quiere comer a sus horas; etcétera. Mi amigo dice que no quiere llegar a la edad de su madre para no "despertar" lástima. Nota de Samuel Rosales en el blog "kien&ke", hecho en Colombia.)
José Rivera, el provocador
Desde que fundó La Cebra Danza Gay en 1996, José Rivera tomó la opción de hacer militancia a favor de la homosexualidad, bisexualidad y los transgénero. Alumno de Raúl Flores Canelo, Rivera entró de lleno a la danza nacional con un discurso provocador y en ocasiones literal para mostrar la parte mórbida y sombría de su propia realidad.
Pero además de su militancia gay, también optó por hacerse de un discurso dancístico y teatral que le procuraran la posibilidad de abrirse las puertas como creador de altos vuelos, que no acepta presentarse en espacios que no sean estrictamente culturales ni permite que sus obras sean vistas desde la perspectiva del morbo ni del espacio escondido.
En cambio, José se construyó su propio espacio dentro de la danza contemporánea independiente, en el que homosexuales, heterosexuales y bisexuales conviven alegremente con el fin de adaptarse a la concepción coreográfica que José impone en su trabajo.
"Las simples cosas", coreodrama o teatro corporal es un ejemplo de su audacia y temeridad para abordar con los mínimos recursos una sátira sobre sí mismos y sobre los bailarines que lo acompañan. Con música de Chavela Vargas, Rivera se exhibe como un bailarín y creador maduro, dominante, envidioso, ladino y extraordinariamente cómico.
Formado en las filas del Ballet Independiente, su dominio de la técnica Graham es evidente, lo mismo pasa con el ballet, pero lo que en realidad le divierte más es la exposición pública de ciertos aspectos políticos y socioculturales del país. Y con ello se convierte en un descendiente directo de la carpa y el cabaret, pero con un estilo técnico y una arrogancia a base del entrenamiento que muchos coreógrafos profesionales convencionales no han logrado jamás.
Y tal es su éxito que llena los teatros no sólo de gays sino de familias completas de clase media y decenas más provenientes de clases populares que están dispuestas a pagar y a seguir como trashumantes las presentaciones del artista de 44 años,
"Mi prima la operada", secuencia en movimiento para travestis fue realizada apenas unas semanas para ser parte del reality de danza contemporánea Ópera Prima Danza Contemporánea que el próximo fin de semana llegará a su fin.
Preocupados, algunos integrantes de la producción del Canal 22 le mandaron decir a Rivera que tuviera cuidado con lo que hacía porque el programa es familiar y pasa por un canal cultural a nivel nacional.
Con su modo decisivo Rivera fue contundente y le dijo a Ruby Gámez, parte del equipo de producción, “que primero le dijera quiénes eran la producción para ir a hablar con ellos y en segundo lugar para qué lo invitaban si ya sabían lo que suele hacer”. No hubo quien le saliera al paso y para su presentación sacó al escenario a los bailarines en plataformas, ligueros ellos y ellas a manera de dominatrices para hacer un sketch en el que hacían pasarela, coronaban a una reina para luego tirarla del escenario.
El éxito fue mayúsculo y desde ese día, durante los nuevos programas de Ópera Prima la gente grita en el Teatro del Centro Nacional de las Artes “queremos a La Cebra”. Rivera, vestido con un minúsculo short con el letrero fuck, una ceñida camiseta y en chanclas responde desde su butaca “a güevo” impávido.
Rivera se pasea por todo el teatro mientras le piden autógrafos, serio y formal en su trato amablemente se toma fotos con quien él quiere y los bailarines del reality han señalado su interés en trabajar con él, por su audacia y temeridad.
Habría que revisar el fenómeno de La Cebra Danza Gay, de las llamadas “cebritas” y de la importancia que tienen en el medio de la danza nacional. Sus propuestas son insólitas y transgresoras. Sólo un ejemplo: la coordinación nacional de danza seleccionó a La Cebra para cerrar las funciones de danza contemporánea el Día Internacional de la Danza, pero no tenía presupuesto para pagarle a nadie.
Rivera aceptó y ese día al terminar su presentación le dijo al público que Teresa Vicencio no le quería pagar a los bailarines:
“Ustedes qué creen, mi trabajo vale o no la pena” le dijo al público. Y ante el entusiasmo bajó a sus bailarines con alcancías de diez pesos a pedir una colaboración. Juntaron cuatro mil pesos y se fueron felices a cenar.
(La última vez que vino el grupo La Cebra a Zacatecas, mostraron un avance de lo que luego sería el espectáculo "Las simples cosas", una especie de homenaje a la cantante y compositora Chavela Vargas. Luego de la función, el coreógrafo y bailarín explicó a los asistentes el evidente desdén de las autoridades del Instituto de Cultura (IZC) por atenderlos. Nadie fue al aeropuerto a esperarlos y trasladarlos al hotel en que tenían reservaciones, nadie les mostró el foro -en el auditorio del museo Felguérez- en donde se presentarían esa noche, los técnicos e iluministas se dilataron en aparecer, etcétera. Era el sexenio nefasto de Amalia García Medina. Por supuesto, Rivera atribuyó las fallas y el desinterés al contenido de sus espectáculos. Nota de Rosario Manzanos en Apro en línea y en Sinembargo.com. En YouTube puede apreciarse un video o consultarse el sitio del La Cebra, danza gay.)
Pero además de su militancia gay, también optó por hacerse de un discurso dancístico y teatral que le procuraran la posibilidad de abrirse las puertas como creador de altos vuelos, que no acepta presentarse en espacios que no sean estrictamente culturales ni permite que sus obras sean vistas desde la perspectiva del morbo ni del espacio escondido.
En cambio, José se construyó su propio espacio dentro de la danza contemporánea independiente, en el que homosexuales, heterosexuales y bisexuales conviven alegremente con el fin de adaptarse a la concepción coreográfica que José impone en su trabajo.
"Las simples cosas", coreodrama o teatro corporal es un ejemplo de su audacia y temeridad para abordar con los mínimos recursos una sátira sobre sí mismos y sobre los bailarines que lo acompañan. Con música de Chavela Vargas, Rivera se exhibe como un bailarín y creador maduro, dominante, envidioso, ladino y extraordinariamente cómico.
Formado en las filas del Ballet Independiente, su dominio de la técnica Graham es evidente, lo mismo pasa con el ballet, pero lo que en realidad le divierte más es la exposición pública de ciertos aspectos políticos y socioculturales del país. Y con ello se convierte en un descendiente directo de la carpa y el cabaret, pero con un estilo técnico y una arrogancia a base del entrenamiento que muchos coreógrafos profesionales convencionales no han logrado jamás.
Y tal es su éxito que llena los teatros no sólo de gays sino de familias completas de clase media y decenas más provenientes de clases populares que están dispuestas a pagar y a seguir como trashumantes las presentaciones del artista de 44 años,
"Mi prima la operada", secuencia en movimiento para travestis fue realizada apenas unas semanas para ser parte del reality de danza contemporánea Ópera Prima Danza Contemporánea que el próximo fin de semana llegará a su fin.
Preocupados, algunos integrantes de la producción del Canal 22 le mandaron decir a Rivera que tuviera cuidado con lo que hacía porque el programa es familiar y pasa por un canal cultural a nivel nacional.
Con su modo decisivo Rivera fue contundente y le dijo a Ruby Gámez, parte del equipo de producción, “que primero le dijera quiénes eran la producción para ir a hablar con ellos y en segundo lugar para qué lo invitaban si ya sabían lo que suele hacer”. No hubo quien le saliera al paso y para su presentación sacó al escenario a los bailarines en plataformas, ligueros ellos y ellas a manera de dominatrices para hacer un sketch en el que hacían pasarela, coronaban a una reina para luego tirarla del escenario.
El éxito fue mayúsculo y desde ese día, durante los nuevos programas de Ópera Prima la gente grita en el Teatro del Centro Nacional de las Artes “queremos a La Cebra”. Rivera, vestido con un minúsculo short con el letrero fuck, una ceñida camiseta y en chanclas responde desde su butaca “a güevo” impávido.
Rivera se pasea por todo el teatro mientras le piden autógrafos, serio y formal en su trato amablemente se toma fotos con quien él quiere y los bailarines del reality han señalado su interés en trabajar con él, por su audacia y temeridad.
Habría que revisar el fenómeno de La Cebra Danza Gay, de las llamadas “cebritas” y de la importancia que tienen en el medio de la danza nacional. Sus propuestas son insólitas y transgresoras. Sólo un ejemplo: la coordinación nacional de danza seleccionó a La Cebra para cerrar las funciones de danza contemporánea el Día Internacional de la Danza, pero no tenía presupuesto para pagarle a nadie.
Rivera aceptó y ese día al terminar su presentación le dijo al público que Teresa Vicencio no le quería pagar a los bailarines:
“Ustedes qué creen, mi trabajo vale o no la pena” le dijo al público. Y ante el entusiasmo bajó a sus bailarines con alcancías de diez pesos a pedir una colaboración. Juntaron cuatro mil pesos y se fueron felices a cenar.
(La última vez que vino el grupo La Cebra a Zacatecas, mostraron un avance de lo que luego sería el espectáculo "Las simples cosas", una especie de homenaje a la cantante y compositora Chavela Vargas. Luego de la función, el coreógrafo y bailarín explicó a los asistentes el evidente desdén de las autoridades del Instituto de Cultura (IZC) por atenderlos. Nadie fue al aeropuerto a esperarlos y trasladarlos al hotel en que tenían reservaciones, nadie les mostró el foro -en el auditorio del museo Felguérez- en donde se presentarían esa noche, los técnicos e iluministas se dilataron en aparecer, etcétera. Era el sexenio nefasto de Amalia García Medina. Por supuesto, Rivera atribuyó las fallas y el desinterés al contenido de sus espectáculos. Nota de Rosario Manzanos en Apro en línea y en Sinembargo.com. En YouTube puede apreciarse un video o consultarse el sitio del La Cebra, danza gay.)
viernes, 8 de junio de 2012
Gabo, lapsus intermitentes
Gabriel García Márquez ha perdido definitivamente la memoria. Esa es la conclusión a la que llegan los medios colombianos a partir de una entrevista que el pasado martes publicó la 'web' 'Kien&ke', en la que Plinio Apuleyo, su amigo íntimo y coautor a su lado de 'El olor de la guayaba', dejaba caer que la demencia senil ya no le permite reconocer a los amigos.
"Las últimas veces que hablamos repetía: '¿Cómo estás, cuándo vienes, qué estás haciendo?' Muchos amigos, con quienes he comentado el asunto, me dicen que con ellos también se limitaba a iguales interrogantes. Entonces hay la sospecha de que simplemente tiene unas fórmulas. Si no reconoce no dice 'no sé quién eres tú', sino que hace unas preguntas genéricas. Me duele mucho esta situación y me inquieta. Gabo siempre ha sido un gran amigo".
El deterioro de la salud de García Márquez es lento y más o menos público desde hace un lustro. Desde que renunció a continuar con sus memorias ('Vivir para contarla', primer tomo de una trilogía frustrada) y sufrió la muerte de un hermano. Poco antes, García Márquez sufrió un linfoma del que salió intacto.
En 2007, cuando el Congreso del idioma celebró en Cartagena de Indias los 40 años de la publicación de 'Cien años de soledad', García Márquez se dejó ver sonriente y feliz y vestido de traje blanco de lino. Sin embargo, en ningúmn momento habló en público ni concedió ninguna entrevista. Por entonces, aparecieron los primeros rurmores sobre los lapsus en la memoria del Nobel colombiano.
Después, el británico Gerald Martin escribió la biografía oficial de Gabo, 'Una vida', en la que se podía leer otra noticia casi velada de la enfermedad del autor: "Con los apuntes adecuados era capaz de recordar la mayoría de las cosas del pasado distante (aunque no siempre los títulos de sus novelas) y entablar una conversación razonablemente normal, incluso divertida".
Hace un año, algunos medios deslizaron la noticia de que García Márquez estaba a punto de morir en París. Su mujer, Mercedes, y su agente, Carmen balcells, desmintieron la noticia. Gabo no estaba en apuros, ni en París, permanecía en su casa de México. Hace unos meses, la familia publicó una fotografía tomada durante el 85 cumpleaños del escritor.
(¿Hace cuánto que murió Carlos Fuentes? La prensa mexicana comentó que quien brilló por su ausencia en los funerales fue Gabo el de Macondo; la fotografía que entregó la familia del día de su cumpleaños a los medios informativos, era una toma"cuidadosa" en la que se adivinaba el silencio de alguien delicado de salud, García Márquez. Hace tiempo circulan anécdotas que hacen referencia a una demencia senil irreversible y gradual. Nota en el diario El Mundo en línea.)
Kafka, naturista y esotérico
Un Franz Kafka escéptico con la medicina tradicional y partidario de una filosofía naturista es el retrato que hacen del escritor checo las cartas inéditas que acaban de ser recopiladas y publicadas en un libro.
Las misivas están escritas por el médico húngaro Robert Klopstock y por el último amor de Kafka, la actriz polaca Dora Diamant, y dirigidas a la familia del autor de 'El proceso', en la época en que se encontraba ingresado en el sanatorio austríaco de Kierling y su vida estaba a punto de extinguirse por la tuberculosis.
"Estaba en contra de los medicamentos, de los rayos X, de las inyecciones. Era incluso ingenuo en cómo usaba medios humanos que no resultaban dañinos, pero que tampoco ayudaban", declaró hoy el germanista Josef Cermak, que acaba de publicar en un libro esa colección de cartas inéditas.
En esas nuevas misivas "hay ahí muchas cosas desconocidas. Se ponen de manifiesto las dos opiniones. Kafka era partidario de la medicina natural, según el principio de que lo que naturaleza estropea, puede ella misma arreglarlo", afirmó Cermak. Por su parte, "Robert Klopstock era partidario del concepto clásico de medicina, lo que significa que intentaba incesantemente aplicar la cirugía", explicó el experto.
Esta nueva correspondencia forma parte del libro 'Zivot ve stinu smrti' (Vida a la sombra de la muerte), en concreto, en una sección titulada "Cartas de Robert". Además de las casi 66 cartas ya conocidas que documentan la relación de amistad entre Klopstock y Kafka, el libro incluye otras 35 cartas nunca publicadas que Klopstock y Diamantova escribieron a la familia del escritor.
Kafka sucumbió a una tuberculosis de garganta y, según Cermak, "Robert Klopstock le sirvió mucho como médico en los últimos meses de su vida en el sanatorio austríaco de Kierling, donde Kafka murió. Se ocupó de él de forma conmovedora, junto a su novia de entonces, Dora Diamantova".
Una amistad de doctor a paciente
El literato y Klopstock habían coincidido antes en el sanatorio eslovaco de Tatranské Matliare, a los pies del macizo de los Montes Tatra, y allí llegaron a intimar, a pesar de que el húngaro era 16 años más joven que el autor de 'La Metamorfosis'.
Kafka, exceptuando a Max Brod y a ese círculo tan estrecho al que pertenecía el médico, "no se refería a la gente por su nombre, y conseguir su amistad, su verdadera amistad, no era fácil", afirma Cermak.
Tras examinar en su conjunto la correspondencia surgida de dos años de trato entre ambos, es evidente para el estudioso la amistad sincera que se profesaron y que llevó a Klopstock a posponer sus estudios por la situación turbulenta que atravesaba Kafka.
Ambos "tenían intereses comunes, que eran filosóficos y teológicos. Porque este judío húngaro tenía gran simpatía hacia el cristianismo. Y después de la muerte de Kafka, se hizo protestante", afirmó Cermak, que trata de reconstruir en el libro algunas de sus conversaciones, en el frontera entre la filosofía y religión.
Cermak ha podido realizar este trabajo gracias a que en los años 60 la familia de Kafka le encomendó publicar las cartas del escritor a su hermana Otilia. "Y esta publicación se vio frustrada por la llegada de los tanques soviéticos y la prohibición de publicar cosas de Kafka en este país", apostilló Cermak.
(Cuando crees que ya se ha escrito todo sobre el autor de "El Castillo" surgen, como en el caso de Pessoa, facetas insospechadas. Nota en Público en línea.)
Las misivas están escritas por el médico húngaro Robert Klopstock y por el último amor de Kafka, la actriz polaca Dora Diamant, y dirigidas a la familia del autor de 'El proceso', en la época en que se encontraba ingresado en el sanatorio austríaco de Kierling y su vida estaba a punto de extinguirse por la tuberculosis.
"Estaba en contra de los medicamentos, de los rayos X, de las inyecciones. Era incluso ingenuo en cómo usaba medios humanos que no resultaban dañinos, pero que tampoco ayudaban", declaró hoy el germanista Josef Cermak, que acaba de publicar en un libro esa colección de cartas inéditas.
En esas nuevas misivas "hay ahí muchas cosas desconocidas. Se ponen de manifiesto las dos opiniones. Kafka era partidario de la medicina natural, según el principio de que lo que naturaleza estropea, puede ella misma arreglarlo", afirmó Cermak. Por su parte, "Robert Klopstock era partidario del concepto clásico de medicina, lo que significa que intentaba incesantemente aplicar la cirugía", explicó el experto.
Esta nueva correspondencia forma parte del libro 'Zivot ve stinu smrti' (Vida a la sombra de la muerte), en concreto, en una sección titulada "Cartas de Robert". Además de las casi 66 cartas ya conocidas que documentan la relación de amistad entre Klopstock y Kafka, el libro incluye otras 35 cartas nunca publicadas que Klopstock y Diamantova escribieron a la familia del escritor.
Kafka sucumbió a una tuberculosis de garganta y, según Cermak, "Robert Klopstock le sirvió mucho como médico en los últimos meses de su vida en el sanatorio austríaco de Kierling, donde Kafka murió. Se ocupó de él de forma conmovedora, junto a su novia de entonces, Dora Diamantova".
Una amistad de doctor a paciente
El literato y Klopstock habían coincidido antes en el sanatorio eslovaco de Tatranské Matliare, a los pies del macizo de los Montes Tatra, y allí llegaron a intimar, a pesar de que el húngaro era 16 años más joven que el autor de 'La Metamorfosis'.
Kafka, exceptuando a Max Brod y a ese círculo tan estrecho al que pertenecía el médico, "no se refería a la gente por su nombre, y conseguir su amistad, su verdadera amistad, no era fácil", afirma Cermak.
Tras examinar en su conjunto la correspondencia surgida de dos años de trato entre ambos, es evidente para el estudioso la amistad sincera que se profesaron y que llevó a Klopstock a posponer sus estudios por la situación turbulenta que atravesaba Kafka.
Ambos "tenían intereses comunes, que eran filosóficos y teológicos. Porque este judío húngaro tenía gran simpatía hacia el cristianismo. Y después de la muerte de Kafka, se hizo protestante", afirmó Cermak, que trata de reconstruir en el libro algunas de sus conversaciones, en el frontera entre la filosofía y religión.
Cermak ha podido realizar este trabajo gracias a que en los años 60 la familia de Kafka le encomendó publicar las cartas del escritor a su hermana Otilia. "Y esta publicación se vio frustrada por la llegada de los tanques soviéticos y la prohibición de publicar cosas de Kafka en este país", apostilló Cermak.
(Cuando crees que ya se ha escrito todo sobre el autor de "El Castillo" surgen, como en el caso de Pessoa, facetas insospechadas. Nota en Público en línea.)
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