Habitaciones contiguas
Ella empieza en esta historia como hija de un plantador de té buscando nuevos
horizontes
Él como un joven apuesto divertido quería conocer mundo escribirlo
Debutaron después de la Segunda Guerra en habitaciones contiguas de una casa en
Londres
Fue Amor desde la primera hasta la última futura mirada
Hubo boda hijos viajes libros
Sin embargo él sentía habitar un cuerpo equivocado
Juntos tomaron la decisión de esperar que crecieran los hijos
Se divorciaron
Él partió al extranjero Cambió de sexo y ya como mujer escribió la experiencia
del más difícil de todos sus viajes
La nueva Ley les permitió un nuevo matrimonio
Una boda íntima acompañados de sus hijos de amigos fieles
Los nietos correteando por el jardín
Cerca del pastel en forma de pirámide dos ramos de rosas
Cuando llegue el momento quieren ser enterradas juntas
En un pequeña isla en el río Dwyfor muy cerca de su casa
Bajo una lápida que guardan desde hace treinta años
Han grabado en la piedra:
“Yacen aquí dos amigas Jan y Elisabeth Morris al final de una vida”
Pero aún no ha llegado ese momento
Y yo estoy aquí copiando un poema de amor escrito por dos seres valientes
Viendo cómo el camello pasa por el ojo de una aguja de plata
Sin dejar de pensar que un caso así es suficiente para devolver la esperanza a seis
mil millones de personas
("periódico de poesía")
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