miércoles, 16 de junio de 2010

JUAN CARLOS BAUTISTA (1964)

DIEZ GARBANZOS
selección: UM

1. El cuarto oscuro es una sala de proyección donde
la película transcurre en la nuca.

2. El travesti, al pasar, me susurra, "tú, la Ignorada".

3. Un travesti al pasar, me bufa: "Tú, la pobre".

4. Al travesti más perfecto lo traiciona la voz: la voz del
joto, del impostor. Por eso mismo, los travestis no la
disimulan; antes, al contrario, la dramatizan. Otra vez,
como en la tragedia griega, la máscara es verdad, y la
voz lo es todo: el personaje y su destino.

5. Noche. Al cruzar frente al espejo, un travesti me susurra:
tú, vuélvete "otra".

6. Los sadomasoquistas son el colmo de la fatuidad. Todos
merecemos ser golpeados por pedir placer, ¿pero por qué
volverlo tan obvio?

7. Pero ese muchacho tenía un culo tan hermoso
que sus nalgas parecían enamoradas entre sí,
y cuando el muchacho caminaba era como si ellas
se fueran besando apasionadamente.

8. Encontrar un amor es un regalo de Dios./ Retener ese
amor es un regalo del diablo.

9. Si crees que la mujer es el comienzo de las desgracias
del hombre, ama a otro hombre; y verás.

10. Hay gente que sólo se cruza con su sombra. Y no
se hablan.

(textos tomados de Aluvión de pensamientos inútiles
y sublimes, ed. de Quimera (Col. Quaderna, No.3)
México, 2010)

1 comentario:

Antonio Marquet dijo...

Curiosa manera de traer la culpabilización al escenario del placer: realmente ¿Todos
merecemos ser golpeados por pedir placer? Cabría preguntar entonces... ¿golpeados por quién? por la autoridad (que no goza carnalmente como la iglesia), por el amo, por el poder (que son los propietarios), por la norma, por la ley (heteronormativa...
Esta formulación ¿no equivale a vivir el placer (gay) como crimen y castigo?
Por otro lado, habría que señalar que el sujeto arropa su culpa en el grupo. Tras ese "todos merecemos" ¿acaso no se traviste un "merezco" que no se atreve a decirlo? Otro diría que lo que merecemos por pedir placer es recibirlo.
Pero esto sería entregarse a una ingenua ley de pesos y contrapesos en que a pedir corresponde recibir. En el terreno del placer la demanda ¿quiere ser satisfecha?
El mismo Bautista señala que no, al decir que conocer el amor es obra de dios y retenerlo es obra del diablo; o al comparar las desgracias de amar a una mujer y a otro hombre...