Desamparo
No hay santuario en el ojo del fósil,
Voyeur, pásalo por alto.
El lento batir de las alas de las damas,
Tendría que haber desfiladeros para cosas así,
Encontrar algo mil años después,
Y sin ninguna utilidad
¡Qué tesoro!
Tendría que haber bosques para viejos
en los que caerse.
Pues verdaderamente he visto a un hombre deshecho
en lágrimas.
Aún hay leche materna en sus lamentaciones.
Su desolación acecha como un perro mordido
Y de ruidosa cola-
Derrama sebo y la blancura prevalece.
Grita "¡Abominable!"
El pobre mercader con el beso en la mano muerta
¿Qué es lo que prestó? Por cuánto prestó
Cuando un hombre se dobla
En falsa enfermedad
(Verdolaga, una planta postrada, que crece pegada al
suelo).
["poesía reunida 1911-1982", trad. osías stutman y rosa lentini, ed. igitur, montblanc, 2004]
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