"Cuando uno lee a Gonzalo Rojas y se ve obligado por el impulso interno de sus textos a hacerlo en voz alta, siente que el poeta es múltiple, que su aliento, la métrica de los sentidos, cambia constantemente. Ahora es corta, ahora se extiende. A veces es la paz, el sosiego de alguna certeza. En otro poema el aliento se corta a media palabra, siente con Celan o Pound que su canto es el de una palabra ahogada que reclama o estalla. Es el silencio roto; es el silencio anhelado.
"Si Rojas respira de maneras tan distintas es porque las temáticas de sus versos son también múltiples: no existe para el poeta tema vedado. La vida y sus manifestaciones infinitas, siempre nuevas y conocidas, siempre vistas a través del cristal de lo leído y al mismo tiempo inéditas, es el tema del poeta."
Gonzalo Rojas (1917/2011 poeta chileno murió la madrugada del lunes 25 de abril), fue parte integrante del grupo Mandrágora, a su generación la sobrevive Nicanor Parra, el autor de los antipoemas, admirado sobremanera por los Infrarrealistas. Ambos, Rojas y Nicanor marcaron al Pablo Neruda de "Residencia en la tierra" y del memorable poema "Walking around".
Trece cuerdas para laúd
D'accord, puestas al fuego todas las mujeres son
pelirrojas, Teresa
de Jesús es pelirroja, Safo, Emily
Brontê es pelirroja, Magdalena de Magdala, tres
de las nueve hijas de Mnemósine y Zeus son
pelirrojas,
Euterpe, Melpómene, Terpsícore por no decir todas las
novias de la locura nacidas y
por nacer llámense Andrómaca
o Marilyn son pelirrojas; ésta
que va ahí y arde es
pelirroja, ésa otra que
lo ha perdido todo en la fiesta es pelirroja, la vida
que me espera es pelirroja, la Muerte
que me espera.
(textos tomados del prólogo de Eduardo Vázquez a la edición Antología personal, ed. Premiá/ UNAM/ UAZ, México, 1988.)
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