De visita
Estoy de visita en una ciudad
desconocida, en un sitio
donde no se adivina la hora
de los sismos; en un lugar
donde a deshoras riñen
los perros con sus sombras,
donde las sombras pasan
quebradas y silenciosas
sobre altos muros; es una ciudad
donde alguien permanece
despierto porque sí;
una ciudad de querellas
no imaginadas, de puertas
de altas bisagras, de cuerpos
alterados al proyectarse
en muros como biombos.
Una ciudad a la que vuelvo
espaciada y calladamente.
[Inédito]
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