viernes, 29 de abril de 2016

Francisco Madariaga (1927/2000 )

Su ataúd es la alborada



El tiempo arrasará todas las rosas:
las florecidas,
las heridas,
las que tienen los labios del verano
como cortaderas carmesíes,
pero volverá el amor de las recolectoras de las rosas,
y la caridad encendida del color del horizonte,
donde se prenden las lámparas de las palmeras al paso del ferrocarril,
oloroso de ciudades y de esteros.
Pasa el entierro del cuerpo de un sueño,
pero su ataúd es la alborada.


("otra iglesia es imposible")

No hay comentarios:

Publicar un comentario