sábado, 16 de mayo de 2015

Griselda García (1979 )

El ojo del que mira

Es ciego el anciano del laúd.
Gira en blanco
su ojo velado
cuando toca.
Herido de luz
de una luz infinita
en el gesto se ve
que es pájaro.

Una explosión de pimpollos en las venas
pétalos que el sueño del mal
ha vuelto negros.
¿Es posible atisbar
por el blanco del ojo
y que lo visto
no deje huella?

Si no se ha buscado
resguardo a tiempo
un batir de alas
ensordece.
Mucho es el daño
que la belleza provoca.


("otra iglesia es imposible")

No hay comentarios:

Publicar un comentario